¿Te mordio la lengua el ratón?

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Ambos jóvenes estaban en la pista, al inicio con un poco de distancia. Mientras sonaba la canción de fondo

        Antes que me vayas dame un beso
          Sé que soñaré con tu regreso
                   Mi vida no es igual
                  Ahora que te perdí
               Cómo te voy a olvidar 

-Baji, con esa ropa me recuerdas al interés amoroso de las protagonistas de la telenovelas que ve mi mamá- Chifuyu trataba de sonar lo más calmado, pero su interior era todo un drama

-La comparación más rara que me han dicho- El pelinegro reía mientras se acercaba más al rubio- Y a ti que te parece esta prota de telenovela?

Sé que me dijiste que el amor existe
Y su poder hace lo que sea
Que cambie el destino y quédate conmigo
Porque no soporto la idea
Que un amor a la distancia fortalece la confianza, termina siendo una odisea
Así es la razón pero mi corazón va ganando en esta pelea
-

-E-Eh? A que te refieres...?- El espacio entre los dos se iba deshaciendo

-Sabes a lo que me refiero Chifuyu- agarro al contrario por la cintura y lo pego más su cuerpo

El Rubio sentía su rostro arder, nunca pensó que sus más profundos sueños se hicieran realidad, quizás si estaba soñando y todo esto era producto de su imaginación

-¿Que pasó gatito? Te mordió la lengua el ratón?- Baji susurraba en su oído

Definitivamente esto no era un sueño.

Y tu recuerdo, me está matando
Hasta la muerte aquí estaré esperando
Nunca lo olvides, te sigo amando
Hasta la muerte aquí estaré esperando

-

El agarre del pelinegro se hacia más fuerte, Chifuyu dirigió su mirada a los ojos de este, se veía como un gato a punto de comerse a su presa.
Una de las manos del mayor soltó la cintura del rubio, dirigiéndose a su mandíbula, la levantó dejando sus rostros prácticamente tocándose.

Comenzó a cantarle una estrofa de la canción

-"Antes que me vaya dame un beso, se que soñaré con tu regreso"- La mano había quedado en la cintura estaba bajando hacia el trasero de Chifuyu- Podrías intentar darme un beso ¿no gatito?

Matsuno tenía todos sus sentidos en alerta, no sabia si escapar del agarre y huir al baño o plantarle un beso al dueño de sus fantasías

-Al diablo con la vergüenza- El rubio agarró la cara del contrario acercandola a la suya

¿Esto estaba pasando? ¿No era un sueño? Eran algunos de los pensamientos que se cruzaban por la mente de Chifuyu

-BAJI, TIENES QUE PROBAR ESToo...- Kazutora traía dos vasos de una mezcla que habían hecho él y Pah- Mierda, acabo de interrumpir algo ¿cierto?

¿Interrumpir? No para nada- Le sonrió al rubio -Tora, ven acá un segundo- Agarro a su amigo por el cuello de la polera, susurandole algo- Eres hombre muerto.

-¡MALDIGO EL DIA QUE NACISTE KAZUTORA HANEMIYA!- Se escuchó un grito desde la puerta de la cocina

Kita junto a Mikey habían estado observando desde el agarre de Baji hasta la interrupción de Kazutora.

-Te diría que fuéramos a darle unas patadas pero creo que alguien ya se esta encargando de eso- Mikey tragaba otro par de galletas mientras escuchaba a lo lejos los gritos del cabeza de plátano

Chifuyu por otro lado se sentía derrotado y con el estómago revuelto, ¡Estaba a punto de besar al amor de su vida! Si no fuera por el maldito de Kazutora.
El no era de los que deseaba el mal, pero realmente quería que le cayera una piedra en el pierna al causante de la interrupción

En ese mismo instante entró un grupo de chicas acompañadas de dos jóvenes, un rubio con un especie de copete y un medio calvo azulado

-¡MICCHI!

-¡FUYU!

Los dos amigos corrieron a los brazos del otro

-Hina, se que acaban de llegar pero me robó a tu novio un segundo- tomo a Takemichi por el brazo dirigiéndose al sofá- Necesito contarte algo ¡YA!.




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