La Luz En Mi Camino [Okkotsu Yuuta x Reader]

Capítulo 37

PERDÓN

Después de un día lleno de travesuras por parte de los gemelos, la noche llegó para los alumnos que estaban cansados y necesitaban comer algo. Todos reunidos comiendo en completo silencio, todo y nada pasaba desapercibido... Después de la confesión de la mañana, que fue un ataque nuclear para ellos y más para Yuuta y Maki; seguían en la lista las travesuras de los gemelos.

Al fin tenían algo de paz...

La puerta fue abierta abruptamente, el fuerte golpe de la puerta contra la pared los asustó. - ¡Panda! - Ambos gritaron buscando con la mirada al susodicho quien rápidamente se escondió detrás de unos de los sillones.

- ¡Aléjense de mí!

- ¡Panda! ¡Panda! - Ellos querían verlo, pero él no. Sus gritos alarmaron a todos. Queriendo ir atrás junto a él, el muñeco viviente echo carrera y los gemelos le persiguieron.

Los niños no dejaron a Panda abandonar la habitación, después de casi dos horas huyendo por toda la habitación, una situación incomoda se armó entre todos.

Los niños estaban mirando hacía arriba de la alacena donde estaba Panda queriendo que no lo tocaran; Yuuta, Maki y Toge estaban haciendo muro entre ellos y la alacena.

Entonces cuando menos lo esperaron y sin saber el porqué, uno empezó a llorar. - ¿Qué? ¿Po-por qué llora?

- ¡Panda! - Su llanto empezó más fuerte, su hermano lo abrazó igualmente contagiándolo a llorar. - ¡Panda no nos quiere! ¡Nos odia!

- Claro que no los quiere par de mocosos malcriados.

- Maki-san. - Eso solo hizo mucho más fuerte su llanto de lo que ya era, fue en eso que Gojo apareció en la sala.

- ¿Qué hacen? ¿Por qué Panda esta allá arriba? ¿Los hicieron llorar? Que malos son.

- Se lo merecen.

- ¿Qué sucede? ¿Por qué lloran?

- Pa-pan-da. - Uno de ellos quería hablar, pero apenas si se entendía.

- Oh ya veo, ¿Es por lo que les dijo _____-chan? - Ambos asintieron mirándolo con lágrimas en los ojos. - Está bien, está bien. Vengan. - Cada uno lo agarra de cada mano y caminaron a los sillones sentándose. - Ustedes también vengan aquí.

Cada uno se miró confundido, no querían ser otra vez blanco de sus travesuras.

- Vamos a hablar. - Suspiró acariciando la cabeza de ellos dos. - Ellos vinieron a hablar ¿No es así?

- S-sí.

Segundos después ya todos sentados, bueno casi todos, pues Panda estaba en una esquina lejos de ellos.

- Bueno, ellos vinieron a disculparse...

- ¡Mentira! - Panda reaccionó rápido poniéndose a la defensiva. - ¡Me arrancaron mi pelaje!

- No me creen. - Habló bajo. - Entonces solo escuchen esto. - De su chaqueta sacó una grabadora.

- Ya me enteré de todo lo que hicieron. Saben que estuvo mal ¿Verdad?

- Queríamos ver que había adentro del muñeco ¿Verdad Tetsuya?

- Si Tetsuo. ¿Qué tipo de relleno tiene?

- No, no, no. Abandonen esa idea, no es solo un simple muñeco, es un Jugai. Tiene vida, una vida propia, él puede sentir, comer, moverse por cuenta propia.