La expresión marchita

«Fragmento: La creación»

Hace muchos siglos atrás la tierra era un lugar incluso más hostil y peligroso de lo que es hoy en día, debido a muchos animales gigantes que dominaban gran parte del planeta, pero estos aún así temían a las pequeñas especies que habitaban los mismos lugares pues eran capaces de grandes proezas o al menos algunos así era.

Nadie sabe con exactitud las formas de vidas que pueden habitar en otros planetas, cuántos serán, cual será su idioma y que tan diferentes sean entre sí o con nosotros, pero una cosa está clara. La relación entre ellos no puede ser tan despreciable como la que aconteció en la tierra.

Hace muchos siglos atrás grandes bestias caminaban junto a los animales, pero también criaturas pequeñas lo hacían, estas criaturas se dividían en tres simples especies.

Los voladores, los terrestres y los atormentados.

Cada uno tenía variaciones entre ellos, algunos carecían de poder, otros carecían de alas, cuernos, cola y cabello siendo reemplazados por plumas, escamas o púas.

En aquellos tiempos las tres especies convivían para así superar el día a día, tenían diferentes encargados para cada labor y siempre se brindaban apoyo entre sí, pero todo cambio aquel día, aquel fatídico día en que un nuevo sentimiento surgió desde lo más profundo de su ser y con él varios más que desataron el primer gran conflicto que ha habido en el planeta dejando como resultado sólo caos, destrucción, muerte y desesperación, todo provocado por un simple sentimiento que se denominó "humano" en aquel entonces una palabra usada únicamente para describir a alguien débil que cómete crímenes y ese sentimiento humano fue...

Superioridad.

Con él varios sentimientos más surgieron como la envidia, los celos, el rencor, el odio y por supuesto el desprecio. Todo lo negativo de aquella época se podía resumirse con esa palabra, pero...

¿Quién fue el que despertó aquel sentimiento "humano"?

¿Qué fue lo que llevó a uno de estos seres determinar que era mejor que el resto?

Los registros de cada especie lo relatan de forma distinta, algunos dicen que fue a quienes hoy se les conoce como humanos antes llamados los terrestres que dentro de todas sus debilidades y carencia de dones, eran quienes poseían mayor población además de facilidad a la hora de crear herramientas llegando a la conclusión de que aquello que hacía tan especiales a las otras dos especies ellos podrían hacerlo con su inteligencia por tanto eran quienes debían dominar sobre los demás, que gracias a sus debilidades estos habían desarrollado un talento más allá de lo imaginable y por lo tanto esto justificaba todo su accionar. Otros mencionan que fue quienes hoy en día se les conoce como celestiales o dioses ante siendo únicamente los voladores, quienes al dominar los cielos siempre veían por debajo al resto y esto tarde o temprano desencadenaría aquel sentimiento dentro de sus corazones pues a sus ojos aquellos que se limitan a la tierra deberían estar para servirles. Finalmente los atormentados ahora conocidos como demonios fueron seres que poseían una inmensa fuerza, poder o resistencia aunque carecían mucho de inteligencia por lo que se dice que dentro de su ignorancia pensaban que la fuerza bastaba para gobernar sobre los demás, creyendo que todo ser que no perteneciera a ellos debía ser su esclavo.

Ninguno quiso dar su brazo a torcer, ninguno quiso arrodillarse ante el otro y por ende la guerra se libró dejando un sin fin de muertos hasta que el conflicto fue detenido por los tres representantes de cada especie que al darse cuenta de cómo estaban destruyendo su planeta, su hogar decidieron formar un tratado de paz que asegurará que esto no volviese a ocurrir, pero el daño ya estaba hecho y la semilla de la discordia había sido plantada y preparada para ser cosechada en cualquier momento por cualquiera de las tres especies pues por más paz que declaren la auténtica verdad es que de ahora en adelante cada especie miraba a la otra con odio, con irá y con rencor pues no olvidarían todo el daño provocado a sus aliados tan fácilmente así que como última medida se decidió la separación de las tres especies.