The Blood Of The Wolves

Epilogo

Levantó mi guadaña del suelo, mi cuerpo aún sigue debilitado por lo duro del embarazo y el parto pero si no me rendí antes no lo haré ahora.

Mis ganas de vivir y de proteger a los míos arde sin cesar en lo más profundo de mi corazón, dejaré mi alma en la batalla y mataré a cualquiera que quiera entorpecer el resurgimiento de los seres míticos.

Jin Young ha sido un gran adversario, no me tiene ni un ápice de piedad y eso me ayuda bastante para enmendar mis errores de batalla.

Cuando el sol está en su punto más alto nos detenemos para regresar al interior de Neuschwanstein; quiero ser una gran guerrera pero me niego a alejarme por mucho tiempo de mis hijos.

Aún son muy pequeños y arrastran sus pequeños cuerpos peludos buscando mi calor cuando me ausentó.

La luna azul recibió a dos cachorros de lobo, una hembra con pelaje blanco como yo y un macho de pelaje negro, sus ojos con heterocromía son tan cambiantes como los míos.

Sus cambios de cuerpo comenzaron a la semana y media de nacidos, aún no sabemos el alcance total de sus poderes pero sí podemos identificar varias cosas.

Yin, es una dulce bebé de cabellos plateados, su forma humana sólo revela marcas como las que tiene Jay, la magia recorre su cuerpo y eso dificulta sus transformaciones ya que cambia de una a otra de manera simultánea razón por la que el hechicero la dejó en su forma lupus.

Yang, es un bebé de cabello negro, su heterocromía cambia de un ojo azul y uno café a uno rojo y otro amarillo, tiene colmillos de vampiro lo cual nos obliga a darle sangre antes que cualquier otro alimentos, a él también lo dejamos en su forma lupus.

Todos llegamos a la conclusión de que es más fácil cuidarlos estando en esa forma, tenemos que enseñarlos a usar sus poderes para que no se hagan daño entre ellos o a uno de nosotros.

La paternidad no le sentó muy bien a todos, Wang e Im son excelentes cuidando a los pequeños, los aman. No digo que BamBam no lo haga pero es demasiado distraído al igual que Yugy así que ellos más que padres se declararon como los tíos consentidores, lo cual no me molesta, es cómico.

Mark y Jin Young son más ausentes, lo entiendo, fueron educados de esa manera y es casi un milagro que los vea acercándose para ver a las bolas de pelos, pero sólo hacen eso. No les dan una caricia y mucho menos juegan con ellos, solo los observan a la distancia.

Jay es un encanto y más con Yin, no soy amante de preferir a uno antes que a otro pero no puedo ponerme loca por eso.

Al final de día ambos cachorros me prefieren a mí, soy su madre, soy la hija de la super luna rosa y como dadora de vida voy a proteger a los míos.

—Lea, estamos listos.

Jay me interrumpe en la habitación, me levanto de la cama cuidando de no despertar a mi bebés y avanzó hasta llegar al enorme salón en donde solemos reunirnos.

—La mayoría de los aliados ya están reunidos -informa Mark.

—El resto están listos para el inicio de la guerra desde sus tierras —agrega Jackson.

—Los humanos han creado armas novedosas pero aún así con Raven buscamos maneras de erradicarlas —explica JB.

—Lea es momento de que des la cara, tú eres la líder de toda esta mierda —dice Jin Young.

Jay me toma de la mano y me encamina a un costado de la habitación, sobre una pequeña mesa que hay delante de mí coloca uno de sus oráculos que me enlaza con cada rincón del mundo.

—La paz en la tierra ha sido erradicada, hay una especie que no deja de dañar a la naturaleza y está misma ha clamando a los seres como yo para volver al mundo un lugar en donde todas las especies puedan volver a convivir.

Yo soy Lea Tala, hija de la super Luna, heredera del poder de la tierra y le declaró la guerra a los humanos para recuperar la paz que tanto anhelan los seres míticos.

Si tienen alguna duda de lo que esta por ocurrir les hago una cordial bienvenida a Transilvania, en ese lugar pueden encontrar un refugio o su muerte así que decidan bien como jugarán sus cartas porque está es una clara advertencia de que no vamos a detenernos hasta que la flora y la fauna recuperen su equilibrio natural.

Dante Alighieri, a ti es al que más ansío ver.

El oráculo se cierra dando por terminada la transmisión, no soy buena con las palabras ni mucho menos para alentar a los demás, pero lo que sí es que daré todo de mí hasta salir victoriosa.