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Yoongi no solía dejar entrar a alfas ajenos a la casa, pero claramente haría una excepción, o tendría que resignarse a vivir con Taehyung inconsciente sobre él.

Namjoon lo tomó y lo llevó al sillón, mientras que Jungkook se miraba el pecho, reaccionando recién a que le habían vomitado encima.
Boqueó.
ㅡ Puedo jurar que entró un poco en mi boca.

El omega en el suelo cubrió su boca ㅡ Es información que no necesito. Con mirarte así ya tengo suficiente.

Jungkook estaba estático, intentando no moverse para no desparramar nada.
ㅡ ¿Estás bien? Cayeron muy fuerte.

Yoongi acarició su nuca y después miró su mano.
ㅡ Me golpeé fuerte y duele, pero no parece ser grave.

ㅡ Taehyung es pesado, ¿eh?

ㅡ Deberías saberlo ㅡ soltó como si nada, haciéndolo avergonzar un poco.

Jeon menor carraspeó ㅡ Uhm, ¿podrías darme algo para limpiarme?

Yoongi se levantó, un poco atontado por el golpe, y apoyó su mano en la espalda de Jungkook, haciéndolo entrar.
ㅡ El baño está por allá. ㅡ lo guió, caminando despacio.

La casa no tenía dos pisos como la suya, pero era larga debido al pasillo que dividía habitaciones.
Una vez llegaron a baño, Yoongi se dirigió a la ducha y la encendió. Metió la mano bajo ella, esperando que el agua fría pasara a caliente.

ㅡ Qué bien, acababa de ducharme. ㅡ se quejó Jungkook, sacándose la remera con cuidado.

ㅡ Déjala en el canasto, podemos lavarla después ㅡ señaló Yoongi ㅡ Buscaré alguna prenda de Taehyung para darte.

ㅡ Ehm, ¿no sería algo raro?
¿Por qué no me das algo tuyo? ㅡ pidió.

ㅡ ¿Raro? ¿No fuiste tú quien se llevó su camisa?

Jungkook se trabó, y quedó mirándolo estático ㅡ ¿Qué camisa? No sé de qué hablas.

Yoongi frunció el ceño, creyéndole ㅡ ¿Entonces dónde rayos la dejó? ㅡ se preguntó.

ㅡ ¿Qué importa ahora? ㅡ se alzó de hombros ㅡ Hey, y no te preocupes por la remera. Lo mejor será tirarla.

Se sorprendió un poco ㅡ ¿Cómo vas a tirarla? Se veía prácticamente nueva.

ㅡ Mhne, relativamente nueva ㅡ la miró ㅡ Pero no importa, compraré otra.

Min tomó la prenda de sus manos y la dejó en el canasto ㅡ Aún así.
Iré a buscar lo más grande que yo tenga.
Duchate bien, hueles a naranja podrida. ㅡ dijo antes de salir de ahí.

Jungkook se olfateó ㅡ Aish, sabía que no se me había ido ese olor.

Namjoon se agachó para ver mejor a Taehyung

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Namjoon se agachó para ver mejor a Taehyung.
Cielo santo, de verdad era bonito, aún si lucía cansado.
Jungkook también era hermoso.

Sin duda alguna, Soobin sería perfecto.
Esperaba que heredara esos dientitos de conejo que tanto caracterizaban a Jungkook.

Crónicas de un alfa embarazado Donde viven las historias. Descúbrelo ahora