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Ꮺ ָ࣪ final 𓂃

Un mes pasó y una semana faltaba para el parto, Jeno casi no dormía porque hace unos días, a Jaemin le habían dado fuertes dolores en la noche y estuvo dos días en el hospital, esos dos días el omega lloró, le dieron la noticia que casi tuvo un aborto involuntario. Ahora estaba Jeno durmiendo y Jaemin en la terraza con Haechan, el pequeño Sungchan y Renjun su amigo (que ahora también era amigo de Hae).

–No entiendo por qué quieren bebés, con Kun además de que no queremos más gastos, nos basta y sobra con los de nosotros – dijo encogiéndose de hombros –Además, yo ya le dije, no voy a estar cuatro meses con una panza y con dolores, no señores, tengo que cuidar mi figura – los tres rieron por el último comentario.

–A nuestra edad no es difícil mantener la figura, además, yo estoy igual y ni siquiera me cuidé – dijo tirando su pelo para atrás para hacerse un medio moño.

–Pero tu cachorrito es muy pequeñito – dijo Renjun con ternura viendo como el bebé gateaba por el patio y jugaba con sus peluches.

–¿Les cuento algo tierno? – dijo de repente Jaemin y los contrarios lo miraron.

–Cuenta – dijo Haechan.

–Hace unos días desperté y Dottori no estaba, bajé para buscarlo y lo encontré dormido en las escaleras con el computador, de curioso revisé qué tenía en la página y era un paquete de ropita de omega y bebé. Cuando lo desperté, lo primero que hizo fue cerrar el computador – dijo con ternura.

–Aww – dijo Haechan soltando una risita tierna.

–Eso es muy lindo – habló Renjun y ambos juraron ver corazones salir de sus ojos.

–Renjun – habló Jaemin con una sonrisa.

–¿Mm? – preguntó mirando al bebé que jugaba con una mariposa.

–¿Estás seguro que no quieres un cachorrito? – preguntó y Renjun lo miró con los ojos bien abiertos.

–Eh... Bueno, la verdad... Es que... Con Kun lo hemos hablado y sí... Sí quiero un cachorrito... Sería muy lindo ver a un pequeño correr por la casa y cuando alguno llegue de casa, que corran a abrazarlo, pero... Queremos que la familia de Kun me acepte y que Kun tenga un mejor empleo para yo poder dejar de trabajar... Pero para eso queda mucho – lo último lo dijo con una mueca.

–¿En qué trabaja Kun Hyung? – preguntó Haechan.

–Es profesor de canto en una escuela, pero está recién empezando, lo aceptaron hace tres meses.

–Jaemin, tus vitaminas – Jeno llegó medio dormido con un vaso de agua y una pastilla.

–Gracias – le dio un corto beso y sonrió para después tomarse la pastilla.

–¿Vitaminas? – preguntaron al mismo tiempo.

–En el último mes he perdido peso y eso es malo para mí y el bebé, y la doctora me recetó vitaminas para mantener el peso – dijo simple.

Jaemin se levantó cuando Jeno le tocó la espalda, y ahora estaba Jeno sentado en la silla y Jaemin en su regazo.

–Pap pap papá – llamó el bebé mientras gateaba hacia el omega.

–¿Qué pasó cariño? – preguntó Haechan, tomándolo en brazos y sentándolo en su pierna.

–¿Papá Mak? – preguntó.

–Está trabajando, nos va a venir a buscar cuando salga – le dijo.

–Papá Mak abazoo – le dijo el cachorro con un puchero.

–Lo abrazas cuando llegue a buscarnos, ¿quieres que lo llame para decirle que venga? – preguntó y el menor asintió.

Mientras Haechan hablaba con Mark y su bebé, Jaemin y Jeno hablaban con su bebé que aún no nacía y Renjun hablaba con su bebé por llamada.