Epílogo (2)

953 48 24
                                    

Una semana luego del juicio y habiendo retomado nuestras rutinas de trabajo para finalizar la tercera temporada de Élite, misma con la que ninguno estaba conforme con el desarrollo de su personaje. Había tantos vacíos y situaciones ridículas en el guión, que nos tenía a todos frustrados y sin tantas ganas de terminar el trabajo, pero tenemos un contrato que hay que cumplir a como dé lugar.

El viernes, aprovechando que todos terminamos de grabar temprano, decidimos ir juntos a cenar. Optamos por un restaurante íntimo y en el que pudiéramos estar relajados, sobre todo cuando Miguel nos informó que tenía algo importante que decirnos.

-Chicos, escucharme –pidió y todas las conversaciones fueron suspendidas– he recibido los guiones de las temporadas cuatro y cinco de Élite, junto con el contrato para renovación y si ya esta ha sido una mierda... las que siguen son peores, así que quería informaros que hasta aquí os acompaño y me bajo del barco.

-Joder, ¿así de malos son? –Pregunta Álvaro– de todas maneras, con o sin cuarta, yo me iba aquí porque alguien –mira a Danna con los ojos entrecerrados– me mata –bromea haciéndonos reír– y bueno, que tampoco tengo ganas de seguir. Sé que esta serie nos ha dado el reconocimiento a muchos y nos ha hecho crecer, pero, que vamos...

-Es una mierda –completa Claudia y Álvaro le guiña el ojo.

-Ningún personaje se salva de ser un hijo de puta y ninguna pareja es endgame –nos cuenta Miguel– Omander vuelve a dar de qué hablar con alguien en el medio y cuernos –Aron y Omar hacen una mueca– Nadia y yo lo dejamos –Mina también tuerce el gesto– Lu está en la mierda por lo que pasó con Polo y Valerio no tiene casi secuencias –Jorge y Danna intercambian una mirada que ya no está llena de incomodidad y se encogen de hombros– Carla se va, pero se arrepiente, regresa y se encuentra a Samuel con otra tía, lo que la hace liarse con muchos tíos, salir de mucha fiesta y ponerse hasta el culo de borracha, para que al final tampoco queden juntos. Ah, y esa tía con la que Carla lo encuentra es la misma por la que el buen Samu y yo nos peleamos –Itzan y yo abrimos los ojos como platos– la única inmune a esta basura es la Rebe, a quien le ponen una novia –Claudia hace la seña de amor y paz con la mano– y parece que termino matando a alguien por esa tía por la que hay disputa con Samuel –finaliza– joder, es que no entiendo cómo es posible que Guzmán se quede como gilipollas cuando matan a su hermana y por esta chica insignificante sea capaz de matar, ¿en qué cabeza cabe tal estupidez?

-Todos estamos claros en que queremos a Diego, pero, joder, que se le fue la olla entera con esos guionistas –comento logrando que todos me den la razón.

-Me fastidia que Samuel en cada temporada tenga una chica diferente. El pobre tío enamorado de Carla, sufriendo desde el inicio y no lo dejan ser feliz o que al menos aprenda a estar solo –se queja Itzan.

-Pues, yo de la nada mato a Polo... –expresa Danna– aún sigo preguntándome por qué... yo no le encuentro sentido alguno.

-Debo admitirles que yo también estaba pensando en dejar la serie –anuncia Jorge– pero ahora que Miguel ha sido el primero en decirlo, creo que lo secundo.

-Pues a mí tampoco me hace mucha gracia lo que quieren hacer con Carmuel y con Carla –digo con una mezcla de indignación y enojo– es que estos imbéciles tienen aserrín en vez de cerebro. También me bajo aquí.

-A ver, a ver, levantemos la mano los que nos quedamos hasta esta temporada –pide Danna poniéndose de pie y todos, incluido Álvaro la levantamos– ay Nálgaro, por favor, ya sabemos que tú sales sí o sí –se burla ella y nos descojonamos al escucharla llamarlo así.

-¿Nálgaro? –Pregunta Álvaro un poco confuso.

-Es que parece que es lo que más entrenas en el gym... hace un tiempo estabas más plano que mis boobs y ahora están grandes y redondas, de ahí viene el apodo –aclara ella entre risas y Álvaro rueda los ojos, aunque termina uniéndose a las carcajadas del resto– retomemos... ¿quiénes nos vamos? –Inquiere nuevamente y todos, sin excepción levantamos la mano.

Cuando las luces se apaganWhere stories live. Discover now