Capítulo XXXVIII

270 38 25
                                    

Hardin

Salí de la tina primero, para buscar una toalla y secar su cuerpo, antes de guiarla hasta mi cama, toda cubierta de pétalos.

—¿Sabes? esto es como esas películas románticas antiguas, donde la primera vez de una chica... Tú me entiendes —comentó acomodándose en medio de la cama y soltando una risita. —Pero amo el cliché —añadió tendiéndome una mano para que me sentara a su lado. Ella aún estaba cubierta por una toalla.

—Eres la persona más importante para mí, Tessa. No sé cómo, pero te metiste bajo mi piel tan pronto como te conocí y no imagino esta etapa de mi vida sin ti en ella —musité acariciando su mejilla con mi pulgar.

—Nunca antes había sentido algo tan fuerte por alguien, Hardin. No creía que las cosquillas en el estómago al ver a una persona fueran ciertas, hasta que te conocí a ti y me enamoré, porque aunque somos jóvenes y nos conocemos hace poco, sé que te amo y valoro cada cosa que has hecho por mí. Sin ti, mi vida en esta ciudad no sería lo mismo y a pesar de lo que me ha pasado, que puede que me genere inseguridad a la hora de tener relaciones, quiero intentarlo, quiero hacerlo, porque no puedo reprimir más lo que siento y lo que me pide mi cuerpo cada vez que te tengo cerca —confesó con determinación y soltando la toalla de su cuerpo, hasta quedar desnuda de la cintura para arriba.

—Tessa —gemí acariciando la curva de su cintura, mientras la acercaba más a mí —Aunque no lo creas, también es mi primera vez, la primera vez que hago el amor —confesé besándola despacio, tan despacio como mi autocontrol me lo permitió.

—Hagamos de este momento un recuerdo inolvidable entonces —gimió sobre mi boca a la vez que se sentaba sobre mi regazo.

Comenzamos a besarnos de forma desesperada, como cuando me atacó en el baño de su habitación. Pronto terminé sobre ella, ambos sin toalla y completamente desnudos. Miré de reojo la puerta para comprobar que estaba con seguro y continué besando cada curva de su cuerpo hasta llegar a su intimidad, desde donde la miré para comprobar que estaba de acuerdo con lo que estaba por hacer. Empuñó sus manos en las sábanas y me dio un asentimiento con la cabeza, antes de curvar su espalda mientras comenzaba a hundir mi lengua en sus labios. Saboree cada parte de ella antes de hundir uno de mis dedos en su interior, tras lo cual se tensó por la invasión, pero necesitaba que se relajara un poco antes de realmente unir nuestros cuerpos.

—Hardin —gimió —No puedo más, siento que voy a explotar —susurró jadeando, casi llegando al orgasmo.

Quería llegar con ella, así que subí por su cuerpo, besé sus pechos un momento y me perdí en su boca mientras me posicionaba sobre ella.

—Voy a entrar ahora, cariño. Si te duele, solo dime que pare —pedí separándome un poco para ponerme un preservativo.

—Hazlo, ya —suplicó, tomando con fuerza mis brazos para pegarme a su cuerpo nuevamente.

Poco a poco comencé a entrar en su vagina hasta que sentí la barrera que nos separaba. La miré a los ojos mientras me introducía más dentro de ella y cuando estuve completamente adentro, esperé a que se acostumbrara a mí para comenzar a moverme y fue la sensación más maravillosa que sentí alguna vez.

Sentirme completamente unido a ella, era algo que era incapaz de explicar. Tessa estaba hermosa retorciéndose de placer bajo mis brazos y no podía dejar de pensar en lo afortunado que era por tenerla en mi vida.

***

Emma

Estaba sentada en mi cama leyendo un libro cuando sentí mi celular vibrar sobre la mesita de noche.

Troian: ¡Ey! ¿qué estás haciendo?🤸🏼Estoy aburrida ahora que no nos han dejado seguir adelante con nuestro plan.

Emma: Ni siquiera teníamos un plan 😅 Estoy leyendo, la próxima semana tenemos control de lectura, por si no lo recuerdas.

Troian: Aburrida 🥱 ¿quieres salir a dar una vuelta? Estoy cerca de tu casa...

Emma: Pasa a buscarme y vamos a una cafetería que queda en este barrio. Sirven un chocolate caliente con canela y naranja que te mueres lo rico que está 🤤

Troian: Espero que no sea uno de esos lugares pijos, que me da alergia y no sabes cómo me pongo 🥸

Emma: Qué con bigotes ya te he visto 😅 Estaba pensando en regalarte una pinza para tu cumpleaños, no vaya a ser que me pinches con esos cañones que tienes.

Bromeé y me di cuenta lo dicho después de haber enviado el mensaje. No respondió más, pero fue cosa de segundos para que el timbre de mi casa sonara. Fuimos caminando hacia una de las cafeterías que quedaban en mi barrio. Si bien era un lugar exclusivo, donde la mayoría de quienes acudíamos éramos gente que vivíamos ahí, no era "pijo" como decía Troian. Era un sitio al que acudía gente de mi edad o familias con niños pequeños. Era el único lugar donde me sentía cómoda para ir y no juzgada por lo que pedía para comer, no así en los otros restaurantes del sector, donde tenía que limitarme a pedir una ensalada sino quería que hablaran a mis espaldas.

Pedimos chocolate caliente y tuve que contener una risa al ver la cara que ponía Troian al probarlo.

—Joder, tenias razón, es el mejor chocolate caliente que he probado y este muffin de zanahoria está muy bueno —comentó saboreando cada bocado.

—Me encanta venir acá porque además puedes ver la costa —dije apoyándome en la ventana.

—Te notó un poco distante —comentó Troian sacándome de mis pensamientos.

—No es nada, solo que a veces me siento un poco lejos de Tessa. Me gustaría estar más como una hermana para ella, pero ella misma me ha puesto frenos.

—¿Estás celosa de Hardin? —preguntó riendo —No puedes estar celosa de tu ex, Emma.

—No lo estoy, tonta, sería ridículo. —respondí a la defensiva —Solo no sé cómo acercarme —confesé.

—Dale tiempo, no está teniendo las cosas fáciles ahora —musitó y me fijé en que tenía la boca llena de muffin de zanahoria.

—Acércate —pedí y me miró raro, pero se acercó por sobre la mesa.

Cogí la servilleta y limpié la comisura de sus labios. Fue en ese momento en que sentí algo más por esa chica que había llegado a revolver mi pequeño mundo de princesa.

ZWILLINGEWhere stories live. Discover now