El otro - Itadori x Lectora x Sukuna (Yandere)

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Día 17

-"Ya falta menos de la mitad de tiempo para que te vayas" Sukuna comentó mientras jugaba con su comida en el almuerzo

-"Oh vamos, no pienses así" le diste una suave sonrisa

-"No intentes animarnos de ninguna manera, te vas a ir, tu vas a vivir feliz, y nosotros nos vamos a pudrir en este lugar con nuestros padres" dijo con seriedad

-"Hey! No seas tan duro con (T/n)! Ella no hizo nada malo!" Yuji no tardó en defenderte

-"Pero es la verdad! Y admitelo! Si vuelven nuestra vida sigue siendo una mierda! Y si no lo hacen! Lo será igual!" Sukuna le gritó

-"Deja de decir esas cosas! Deja de decirlas!" Yuji le empezó a gritar también

-"Ya basta los dos!" gritaste levantandote y golpeando la mesa llamando la atención de ambos

Te miraron con sorpresa por tu repentina reacción.

-"Se habían estado portado muy bien, se llevaban bien, incluso teniendo todas sus diferencias, pero esta vez estaban a punto de llevarlo muy lejos. No me gusta la idea de que discutan, así que por favor, compórtense" dijiste cada vez con más calma, y tomaste de nuevo asiento suspirando

-"Tu eres... Incluso mejor que nuestros padres" Yuji dijo en una sonrisa "De verdad deberíamos pensar que haremos cuando ya estemos más cerca de que te vayas..."

-"No lo hará" Sukuba dijo mirandote "Verdad?"

-"Yo..." te quedaste en silencio un momento

Dudaste respecto a como responder eso, temias de que según lo que respondieras, iba a afectar bastante en su comportamiento.

-"Lo podemos platicar, tienes razón" dijiste asintiendo con la cabeza "Pero primero deben comer, si?"

-"Si pudieras, te quedarías con nosotros?" Yuji preguntó en una sonrisa

-"Yo no tendria problema con eso, pero que dije?" le diste una suave sonrisa

Así se pudo continuar el almuerzo con cierta paz.

Así de igual manera el resto de la tarde, pero notaste algo durante esta, era que ellos te habían estado observando, cada movimiento que hacías, estaban al pendiente de todo lo que hacías, todo lo que decías.

Atentos a que pista podrías darles, sobre lo que harías al momento en que te tuvieras que ir.

-"Qué les parece si llamo a sus padres para ver como están?" les diste una sonrisa

-"Oh! Si! Llama a mamá!" Yuji dijo entusiasmado mientras Sukuna se cruzó de brazos fastidiado de sólo oír

Sonreiste y fuiste a buscar el teléfono, marcaste el número y esperaste a que respondiera alguien, hasta que oiste que contestaron.

-"Hola! Soy (T/n)" dijiste

"Hola cariño! Qué tal va todo?" se escuchó la voz de la mujer del otro lado

-"Pues estamos muy bien, los chicos-" te quedaste en silencio un momento notando la equivocación que habías hecho

"Qué dijiste? No te oigo! Estoy perdiendo señal! Te llamaré cuando tenga señal de nuevo! Les mando saludos~"

Se escuchó sólo eso para luego oír como la linea se había cortado, te quedaste en completo silencio.

Era extraño, muy extraño.

Volviste a llamar solo por mera curiosidad, esperaste en la linea un momento, y volvieron a contestar.

No dijiste anda al principio.

"Hola! Qué tal están las cosas por allí?" se escuchó la voz de la mujer otra vez

Te quedaste en silencio de nuevo, esperando algún otro tipo de respuesta.

"Estaba segura de que todo estaría genial~ nos vemos pronto! Debo irme, Jin me está llamando!"

Y la llamada se cortó de nuevo.

En ese instante colgaste el teléfono.

Eran llamadas grabadas...

Por qué habían dejado de llamar para saber cómo se encontraba su hijo hace tanto tiempo?

Realmente habían huido?

-"Te lo dije" Sukuna dijo susurrandote en tu oído viendo tu expresión perdida y sorprendida "Si ellos tuvieran la opción se huir, lo harían" agregó cruzado de brazos susurrando y se alejó

-"Y qué dijeron??" Yuji preguntó acercándose a ti curioso

-"Ellos están bien" mentiste rotundamente en una sonrisa, no queriendo herir los sentimientos de Yuji, quien realmente se veía muy apegado a sus padres "Y se alegran de que nosotros también estemos bien, dijeron que te aman mucho"

-"Jeje~ me pone feliz oír eso!" Yuji dijo en una sonrisa para luego salir de aquel cuarto

Tenías dos posiciones, Yuji por un lado, que realmente había crecido con cierto cariño, y tenía cierto apego a sus padres. Y Sukuna, que aborrecia a esas personas, porque le hicieron la vida imposible.

Tenías que hablar con alguien respecto a la situación con los señores Itadori.

Y sólo tenías a una sola persona para platicar respecto a eso.