𝟷

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Estaba realmente nerviosa, hoy al fin iría a su universidad soñada en Los Angeles, Jennifer Garcia, iría a estudiar a unos pisos que le daban en la universidad, eran bastante lujosos, pero no eran tan caros, estaba realmente emocionada, pues era su sueño, y lo cumpliría. También estaba feliz de irse por la triste razón de que estaba harta escuchar a sus padres discutir tanto, ya no era normal todo lo que discutían, no los soportaba. Por una parte no quería irse ya que no quería dejar a sus dos hermanos pequeños, Bruno y Cata, el chico tiene 14 años y la pequeña Cata tiene 6, no quería que se quedaran solos con sus padres y que los escuchen discutir tanto. Siempre que podían, cuando sus padres discutían salían a dar una vuelta, o a algún sitio.

Fue a despedirse de sus padres, los cuales estaban, su madre leyendo y su padre viendo la televisión.

-Adios- dijo  yendo hacia ellos y abrazandolos.

-Adios hija- dijo su madre y volvió su vista al libro.

-Adios Jeni- dijo su padre levantándose del sofá y yendo a abrazarla otra vez.

-Adios papa- dijo devolviéndole el abrazo y dándole un beso en la mejilla.

-Como discutáis tanto como lo habéis hecho estos años os juro que os dejo de hablar y me llevo a Bruno y a Cata a Los Angeles, no merecen escucharos discutir- dijo a sus padres.

-Lo intentaremos- dijo su madre desviando ligeramente su vista del libro.

-No lo intentarán!- dijo alzando la voz. -Lo harán, si o si!- dijo en el mismo tono lo siguiente.

-Te lo prometo Jeni- dijo su padre a su hija mayor. -Te voy a hechar de menos.

-Y yo- le dijo a su padre y fue al cuarto de Bruno que es donde estaban sus hermanos.

-Mis chicos, os voy a hechar de muchísimo de menos- les dijo a ambos entrando a la habitación y yendo a abrazarles.

-Nosotros a ti Jeni- dijo su hermano correspondiéndole el abrazo. -Cuidare de Cara-

-Llamarme cuando lo necesitéis, aunque sean las tres de la mañana- les dijo abrazándoles más fuerte. -Os quiero un montón-

-Te quiero- le dijo ahora su hermana besando su mejilla.

-Me tengo que ir ya, pero os prometo que os llamo en cuanto llegue, vale?- les dijo casi llorando, no quería dejarlos solos.

-Vale, suerte Jeni- le dijo su hermano abrazándose por última vez.

Salió de la habitación con lágrimas en los ojos, se las limpió con las yemas de los dedos y salió de casa, el taxi que había pedido sólo tardo un par de minutos en llegar, subió sus maletas al taxi y después ella, el taxista la llevo al aereopuerto.

Cuando llegó le pago al taxista y bajo sus maletas, fue a facturar las maletas grandes quedándose con una maleta de mano y un bolso. Le escribió a su padre que ya estaba en el aereopuerto para que estuvieran más tranquilos, ya que sabía que a su madre no le importaba en lo más mínimo. Su relación con su madre era realmente mala, con su padre se llevaba bien, el fue el que siempre se ocupaba de ellos, su madre siempre se iba con sus amigas o con quien sea fuera de casa u volvía a la noche, su padre intentaba poder hacer todo pero también tenía trabajo por lo que no le era tan fácil, pero su hija mayor Jennifer siempre intentaba ayudarlo. Sus padres discutían un montón, y aunque su padre siempre intentaba que no pasara su esposa le sacaba de sus casillas. Todo en mundo hablaba de lo mal que lo pasaban los niños con padre divorciados, pero que hay de los que sus padres deberían de haberse divirciado hace mucho y no lo han hecho todavía?.

Hizo todos los papeleos que había que hacer para el avión y fue a la sala de espera hasta que pudieran embarcar. Espero hasta que al fin les dejaron entrar, el vuelo duraría 12 horas 45 minutos, no sabía que rayos haría por tantas horas, pero al final resultó que se durmió todo el vuelo, lo cual agradeció porque eso hizo que se le hiciera mucho más corto el viaje. Una vez aterrizaron salieron del avión y fueron a la cinta para recoger sus maletas. Recogió las suyas y se dirigió a la salida, pidió un taxi y espero a que la llevara a los pisos que les daba la universidad a los estudiantes de esta, su nivel de inglés era bastante alto, pues en el colegio era su clase favorita y veía todas las películas y series en inglés.

Una vez llegó a los apartamentos le pagó al taxista y salió del coche con sus maletas,entró al edificio en el cual había un guardia que le pidió su dni para saber si podia pasar o no, entro al ascensor y le dio al piso 13, el piso donde se encontraba su habitación, tuvo suerte, era su número favorito, aunque todos decían que era de la mala suerte. Bajo del ascensor una vez este se había parado y abierto las puertas y fue por el pasillo hasta llegar a la habitación número 13, la suya, abrió con la tarjeta que le habían dado y entró,la habitación era bastante guay.

Entras y había un espejo de cuerpo completo junto a la puerta, caminas unos cuantos pasos y se veia una cama junto a la pared y otra junto a la pared pero al otro lado de la habitación, había dos camas a que compartiría cama con otra universitaria, había una pequeña cocina, solo tenia nevera, microondas y un par de armarios donde suponía que se encontraban los vasos, cubiertos, platos y demás. Había también un gran armario el cual compartirán ella y su compañera de cuarto, el baño también era bastante grande y tenía dos lavabos.
Decidió todavía no sacar su ropa y ponerla en el armario para esperar a su compañera de habitación y así dividir el armario, se sentó en una cama y estuvo con el móvil hasta que su compañera llegará, decidió escribirle a su hermano pequeño, Bruno,y a su padre, ya que no le podía llamar porque en españa eran las dos de la mañana, pues eran 9 horas de diferencia, eso le haría difícil hablar con sus hermanos y su padre, pero se las arreglaría, aunque sea cinco minutos. Estuvo un rato más viendo sus redes sociales hasta que la puerta de la habitación se abrió y dejó a una chica, parecía bastante mona, era pelirroja como Jennifer, y tenía buena pinta, supuso que se llevarian bien.

-Hola- dijo la pelirroja, la cual desconocía su nombre, entrando a la habitación y cerrando la puerta detrás de ella.

-Hola!- dijo Jennifer dejando su teléfono a un lado y levantándose de la cama.-No he ordenado mi ropa todavía ni he hecho nada para que nos pongamos las dos de acuerdo-

-Gracias- dijo la nueva con una sonrisa, -Si quieres quédate tú la cama en la que estabas y yo en la otra-

-Vale, me parece bien- contestó la joven sonriente. -Por cierto, me llamo Jennifer, pero todos me llaman Jeni- se presentó la rubia.

-Me encanta tu nombre, yo me llamo Catherine, pero me suelen llamar Cath- se presentó también la pelirroja.

-Gracias, a mi también me gusta mucho tu nombre- dijo Jenni mientras abría su maleta.
-El armario como lo dividimos?- le preguntó a su nueva amiga y compañera de habitación.

Al final decidieron como dividir el armario y el baño, así que ambas empezaron a deshacer sus maletas, ordenaron todo en el armario y en el baño y luego se quedaron hablando sobre todo por unas cuantas horas, la verdad que en una tarde ya se habían hecho muy amigas.

💖✨

I'll always choose you -Ferran Torres-Where stories live. Discover now