Promesas con garrita y otras cosas bonitas

2.2K 180 16
                                    

Los preparativos para la boda de Alba y Natalia iban casi volando, aunque varias veces se habían visto ajustadas de tiempo, puesto Alba se encontraba realizando horas extra en la oficina para poder tomarse sus días para la luna de miel, y Natalia estaba enfocada en ambos trabajos ya que, para mal o para bien, una boda no se paga sola.

María, la madre de Natalia, se encargaba a la par de la Rafi de darles una mano en todo lo que pudiese, ya fuese llamando decoradoras, eligiendo alguna que otra mínima cosa de la cual las chicas no pudiesen encargarse, contratando fotógrafas, y por qué no, eligiendo algún que otro platillo.

Si bien contarle a la madre de la morena la relación que tenían había sido un poco complicado, ya que ella creía firmemente que Natalia estaba enamorada de Mikel, una vez aclaradas las cosas, María se lo tomó muy bien. Eso sí, no le faltó oportunidad de echarle en cara el hecho de que jamás le había contado que había tenido una novia en la secundaria que había significado tanto en su vida como para nunca haber perdido ese amor que le tenía y tener la voluntad de retomarlo tantos años después. Sin embargo, ella era una mujer comprensiva y apacible, de las que no dudarían un segundo en sacar garras y dientes para defender a sus hijos, así que su primer reacción luego de conocer a la mujer que le había robado el corazón a su hija fue sonreír y darle un fuerte abrazo para demostrarles que las apoyaría por el resto de sus días.

Ahora, las vacaciones de verano habían llegado casi de la mano del cumpleaños de Aura, quien a su manera, es decir, tímidamente, había dado a entender que estaba muy emocionada por pasar su primer cumpleaños con Alba y Olivia. Había pasado ya casi un año desde que se mudaron con ellas, y aunque al principio le había costado un poco soltarse del todo, cada día le era más habitual llamar a la rubia mamá, y no se avergonzaba para nada de recalcar cada vez que podía, de manera muy orgullosa, lo mucho que quería a su hermana pequeña.

La mañana del martes 22 de junio, Alba se había encargado de llevarse a Aura y Olivia a hacer las compras y a pasar el rato juntas, mientras que Natalia aprovechaba sus recientes vacaciones para asistir a la cita con la modista que tanto venía posponiendo desde hacía ya casi dos meses. A la rubia le rondaba por la cabeza la incesante pregunta "¿Qué se pondrá?", pues ni ella le había dicho si se había decidido por vestido o traje, ni la morena había soltado palabra al respecto. De acuerdo mutuo, sería una sorpresa para el día de la boda.

- Yo digo que se pondrá un vestido –dijo Olivia con convicción, y luego se llevó una cucharada de helado de cereza a la boca-. Yo me pondría uno para mi boda.

- Pero mamá no es como tú –rebatió Aura-, aunque también puede tener gustos extraños a veces. Pero yo creo que usará un traje –meditó, antes de darle un sorbo a su batido de vainilla.

- ¿Apostamos? –preguntó la más pequeña, alzando las cejas. Alba tuvo que apretar los labios para no reírse ante el gesto que su hija había adoptado definitivamente de Natalia.

- Vale –sonrió Aura, y luego de pensarlo unos segundos, prosiguió-. Si mamá usa un traje y tú pierdes, entonces tendrás que ocuparte de mis labores de la casa por un mes, y sino yo haré las tuyas.

- Joo, Aura, un mes es muchísimo tiempo –se quejó Olivia, echando la cabeza hacia atrás-. Bueno, vale, pero tienes que cumplir eh –dijo, señalando con su pequeño índice a su hermana mayor.

- Por la garrita –asintió Aura, extendiendo su dedo meñique el cual fue atrapado por el de la de bucles.

- Por la garrita.

Alba dejó salir una pequeña risa ronca tras presenciar la apuesta y se dedicó a saborear la ensalada de frutas que se había pedido. Aunque acababan de entrar en verano, debía admitir que la temperatura estaba agradable y no había ese calor sofocante que te hacía sentir la molesta gota de sudor recorriéndote la espalda.

La Pequeña Familia || ALBALIAWhere stories live. Discover now