Euphoria ||•Emiliaco /Libro ||

sᴇʀᴘɪᴇɴᴛᴇ ᴇᴍʙᴜsᴛᴇʀᴀ

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Todo entre familia.
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Emilio recordaba ese día como si fuese ayer. Se podría decir que fue cuando realmente firmó su divorcio, porque la firma en el papel no era nada comparado con lo que ocurrió ese día.

Hacía ya cinco años, él y su ex esposa habían estado hablando sobre la probabilidad de un divorcio. No iban nada bien en ningún aspecto y, si bien no se llevaban con ganas de matarse, ninguno de los dos era feliz con la vida que llevaba.

En esa casa solo existían las risas cuando su pequeño hijo llegaba de la escuela, y eso definitivamente no estaba bien.

El sexo era un desastre, la comunicación era fatal, los momentos a solas eran aburridos, incluso se había perdido ese calorcito en el pecho cuando veían al otro jugar junto a su hijo.

Sin embargo, habían estado intentando poner de su parte durante todo ese año desde que la palabra "Divorcio" había aparecido en la ecuación.

Salidas familiares, fin de semanas en hoteles románticos, gestos pequeños y lindos detalles, pero nada los había hecho sentir bien nuevamente.

Si bien su ex esposa María nunca había conseguido los papeles de divorcio, era obvio que iban hacia ese fin y llegarían más temprano que tarde; sin embargo, Emilio apresuró el proceso de manera totalmente abrupta aquella mañana de navidad.

La familia de María se había quedado por las fiestas, durante el año nuevo vendrían los Osorio, siempre era así.

Todos dormían a las tempranas seis de la mañana, cuando Emilio bajó a la cocina por algo de agua y para salir de la cama que estaba compartiendo con María y su hijo, Diego, a falta de lugar donde pudieran dormir sus invitados.

Oyó un ruido proveniente de la sala, donde el hermano de su esposa dormía, encontrándose con la imagen del tío de su hijo, adentrando dos dedos en su interior mientras gemía mirando su fotografía en la pared.

Fue la erección más dura y grande que había tenido en años.

Ni siquiera podía explicar en palabras todo lo que se pasó por su mente cuando se lanzó sobre él y acabó empotrandolo contra el sofá de la sala.

Que María haya bajado por el ruido y los haya visto, fue simplemente el detonante del divorcio que llevaba en espera por más de un año.

Cuatro años después de aquello, volvía a ver a Joaquín con esa sonrisa en su rostro como si no hubiese sido su culpa que haya mandado al traste cualquier minima posibilidad de salvar su matrimonio.

Porque si, Joaquín no solo era el hermano de su ex esposa, también era el causante de su divorcio.

María siempre le dijo que Joaquín era un maldito pervertido, le advirtió varias veces que le había dicho comentarios bastante inapropiados, pero que no le tome importancia. "Joaquín es así, mal hablado e imprudente".

-¿Que haces aquí?- Preguntó al verlo de pie frente a su casa.

-Vengo a buscar a Diego- Dijo obvio. -María me ha mandado porque sale más tarde del trabajo-

-Puede quedarse hasta que termine- Respondió serio, no le gustaba que su hijo pase tiempo con él, Joaquín no era buena influencia.

-Oh dios, no seas tan egoista- Espetó rodando los ojos pese al rostro de incredulidad. -Saldrá de trabajar cansada y solo quiere llegar a su casa y ver a su hijo ¿Y tu la harás dar la vuelta a la ciudad solo para venir a recogerlo cuando yo puedo llevarlo?-

-¿Tu no tienes trabajo o qué?- Preguntó con el ceño fruncido.

-Si, pero no te puedo decir que es sin que me acuses de profanar mentes- Rió entre dientes.