¿Qué puede salir mal de una recurrencia a la lectura del tarot, una tarde de té y una leída de mano?
Y más si involucra a un fotógrafo en busca de inspiración, un modelo muy reconocido, un escritor de ¿caminos? y a ¿un brujo novato?
Que tal si desc...
☙⧼ Perdona a esta cabeza tonta, por no recordar ⧽❧
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
El recorrido por la carretera fue tranquilo, la música suave se podía escuchar en el auto, la esencia del mar se estaba colando por la abertura de una de las ventanas.
Está era la paz que quería, una dónde podía estar en una ambiente cálido, sin molestias, sin los paparazis a la caza de algún chisme tonto.
Muy en el fondo, Yoongi siente que en algún momento de su vida, tendrá ese descanso. Tal vez su vida pasada fue trágica y en esta quería disfrutar de ella, pero no cree que quería disfrutarla de esa manera.
SeokJin aparcó en un lugar un poco alejado del establecimiento de comida, despertó a Yoongi de su pequeña siesta, puesto que el sueño le había ganado en todo el camino hacia allá.
— Hyung, es hora de despertar, ya hemos llegado.
— Déjame dormir un poco más. —el pelimenta decía entre susurros roncos.
— Si lo dejo dormir más, se perderá de la gran oferta de este lugar. —SeokJin trato de persuadirlo, sin embargo Yoongi no se inmutó— La oferta en 2x1 en carne asada y bulgogi de la casa.
Y cómo por arte de magia, el pelimenta despertó de su ensoñación.
— Hubieras empezado por ahí, nadie debe perderse de una oferta y más si se trata de carne. —ambos salieron de auto y se dirigieron al establecimiento.
Con el debido respeto entraron al lugar, saludaron a la señora que se encontraba ahí y se sentaron en una mesa cerca a la ventana. El lugar era tranquilo, un poco frío pero se entendía puesto que estaban cerca de la orilla del mar, además de que había poca gente, unas cuatro o cinco personas más.
— Es muy agradable aquí, muchas gracias Jinnie. —expreso el pelimenta mostrando una sonrisa sincera.
— Descuide hyung, siempre estaré para usted. —le sonrió en respuesta, revolviéndole un poco el cabello— En esta y en todas mis próximas vidas.
Una pequeña risa soltó Yoongi, desde el fondo de su corazón agradecía mucho el hecho que Jin siempre lo apoyara y cuidara, sentía que le debía mucho.
— Hyung... —el pelinegro interrumpió los pensamientos del otro.
— Dime.
— Pasando por aquí, divise una pequeña feria y por lo visto no hay mucha gente. Me preguntaba si usted le apetecía pasar el rato, no sé, tal vez pueda encontrar algo que le guste y le ayude a despejarse un poco.
— Jin...
— Esta bien si no quiere hyung, es su decisión después de todo. —SeokJin hablo tan rápido, que no le dio el tiempo suficiente a Yoongi para darle una respuesta ante su invitación. — Lo lamento, yo...
