Monstruos en Nome.

¡Date Prisa Balto!

Jamas habian visto algo igual.

En su vida se habian sentido tan cerca de la muerte como lo estaban haciendo en ese momento, y esa no era en absoluto una experiencia agradable para nada, no lo era.

Solo estaba a un par de metros de ella, y sintieron todos por igual que la sangre de su cuerpo se congelaba y endurecia rapidamente como hielo, y no habia sido por el frio, se quedaron helados, y no era por las bajas temperaturas de el lugar.

No. Ellos estaban congelados, paralizados del terror.

Steele y el equipo lo tenian justo delante de sus ojos, un ser grotescamente grande, enorme, capaz de matarlos a todos de un pisoton. Se veia muy delgado, y su cuerpo era demasiado alargado, pero lo mas inquietatante de su aspecto, era que su cabeza, no se veia como algo que ellos hubieran visto antes, de echo todo su ser completo era algo que nunca en su vida habian visto.

Solo lo habian visto por unos cuantos segundos, ellos no necesitaban que nadie se los dijera dos veces, se habian paralizado, todos por igual, cada uno de los perros del equipo, y el mismo musher estaba congelado, y ciertamente Steele no era la exepcion, su corazon se le habia detenido, todos estaban de acuerdo con lo mismo, querian echarse a correr, pero tambien tenian en comun el echo, de que sus piernas y patas no les respondian a ninguno de ellos.

Querian correr, pero ya estaban inmoviles, sabian que no podrian moverse de donde estaban por si solos, entonces comprendieron que su vida estaba en muy grave peligro.

El ambiente se habia tornado todo tenso, un silencio abrumador se adueño de todo el ambiente a su alrededor, nadie podia hablar, su boca ya no les permitia formar las palabras, de echo, ninguna parte de su cuerpo les parecia funcionar en ese momento, todo lo que podian hacer en ese momento, era solo mirar y observar, con sus ojos, fijamente y sin parpadaer ni una sola vez, hacia arriba. A la monstruosa criatura que tenian delante de sus ojos, el silencio entre ellos, literalmente era de muerte, pero este finalmente se rompio, cuando la criatura, fue quien decidio romper el silencio en la habitacion.

Sin nada mas antes, este ser inmdiatamente dio un paso para atras, y con su peculiar cabeza, hizo como si mirara hacia abajo, solo para rugir.

Un fuerte y estruendoso rugido, que hizo reaccionar a todos los perros, y finalmente los pudo sacar de su trance, cuando al fin pudieron reaccionar, fue para taparse los oidos, por causa de la increible fuerza de ese ruido infernal.

Un ruido capaz de provocarles un verdero infarto, afortunadamente no fue asi, ya que al haberlos hecho reaccionar con el ruido ya antes mencionado, el musher pudo rapidamente dar la orden a sus perros de que corrieran con todas sus fuerzas, pero ni siquiera tuvo que hacerlo, antes Steele inmediatamente dio la media vuelta para salir disparado como una bala, y por supuesto, tanto Nikki, como Kaltag, como Star, como todos los demas perros en el equipo, tuvieron que arrancar a correr, siguiendo el ejemplo de Steele, y mas que para llevar mas rapido la medicina, ahora era para salvar sus propias vidas.

El ser frente a ellos, levanto con fuerza uno de sus pies, listo para aplastarlos, sin embargo no lo consiguio hacer, pues todos habian alcanzado a quitarse justo a tiempo del lugar, y ahora se encontraban corriendo, todos desesperados por alejarse de ese monstruo.

Y sin embargo, esto no parecia que fuera a funcionar, el era mas grande que ellos, con unas piernas mucho mas largas, que les hizo pensar que por mas que corrieran, no serian capaces de dejarlo atras, pero al menos tenian que intentarlo, y asi lo hicieron, Steele y compañia empezaron a correr con todas sus fuerzas, pero el ser desgraciadamente les estaba ganando. No importaba cuanto corriera, los ruidos de que aquel infernal ser jamas se alejaban, seguian oyendose cerca, y ellos por su parte no podian evitar gritar como locos, a causa del terror que les infundia esa cosa, dandole a la misma la ventaja de saber donde estaban a causa de sus gritos, pues ellos tambien intentaban esconderse en los arboles y no les servia de nada.

Nikki: ¿Que demonios es esa cosa?

Kaltag: No lo se, ¡Pero no quiero averiguarlo!

Star: ¡Nos va a comer!

Todos: ¡Callate Star!

El musher no paraba de gritar desesperado a sus perros que fueran mas rapido, pues si no lo hacian ese ser seguramente los alcanzaria, y haria con ellos algo que no quisieran imaginar.

Steele estaba cegado, por el miedo, no estaba prestando atencion a lo que hacia, y solo corria por el instinto de supervivencia, un instinto que no le estaba fallando.

Desesperado por que esa cosa no los alcanzara, Steele tenia que tomar una decision rapido, pero pronto el tiempo se le acabo de inmediato, cuando todos volvieron a escuchar fuertes pisadas detras de ellos.

En un movimiento desesperado, Steele desvio a todo el equipo, ignorando por completo las ordenes del musher, pues pensaba que sabia lo que hacia, y en un movimiento rapido, sin darse cuenta, hizo que todos terminaran por deslizarse colina abajo, los ruidos aun continuaban, sin embargo ya solo podian precuparse por no salir lastimados a causa de la enorme caida, que los llevo a una serie de accidentes, como hacer que el musher se golpeara con varias ramas en aquella colina, que derraparan todos a la vez, pero luego otros dejaran de hacerlo y finalmente todos cayeran y se golpearan.

Varios perros se terminaron de enterrar en la nieve, pero el musher por su parte, se golpeo la cabeza tan fuertemente que quedo inconsciente, malherido y sin poder moverse, todos quedaron completamente aturdidos por varios minutos, cuando al fin pudieron reaccionar, suspiraron de alivio pensando que ya estaban a salvo, y asi fue, pero ahora por escapar de un problema se econtraban en uno nuevo, en un nuevo problema, su musher no reaccionaba, estaba inmovil, afortunadamente la medicina, la caja con ella no se habia hecho daño, pero nadie queria subir, porque temian que la criatura aun esuviera alla afuera y les hiciera daño, aun podian escuchar los extraños sonidos producidos por ese ser que debia haber salido del mismo infierno.

Todo paso demasiado rapido, muy rapido, hace solo unos minutos que el monstruo estaba persiguiendolos, y ellos en respuesta solo pudieron echarse a correr, para al final, caer por un acantilado y dejar inconsciente al musher del equipo, tomo unos breves momentos antes de que uno por uno de los perros recuperaran el conociemiento, a diferencia del musher, el golpe solo los aturdio un poco, y sin embargo, aun asi los problemas no habian acabado.

Nikki: *saliendo de la nieve* Ahy, me golpe la cabeza con algo.

Kaltag: *saliendo tambien de la nieve* ¡Si! Con mi cabeza.

Otro de los perros, se acerca para ver que tan mal quedo el musher: Parece que esta mal herido Steele.

Star: Steele...¿Y ahora que hacemos?

Pero Steele no respondio, no porque no pudiera, sino porque no sabia que decir, el miedo se adueño por completo de el, y no tenia idea de como actuar a continuacion, sabia que era muy peligroso volver a subir ahora, pero aun si no lo fuera, igual se habian terminado de perder al caer en ese lugar tan abruptamente.

Nadie se atrevio a decir nada, ninguno se sintio capaz de abrir la boca para decirle algo a Steele, algo sobre el estaba mal, muy mal, pero no podian decirlo, o mas bien, no debian, este no era el momento apropiado, no lo era de ninguna manera, solo con ver su cara ellos supieron que era una mala idea decir algo con todo lo que acababa de pasar. Y ese fue el error, ese fue el pensamiento que los termino de condenar a todos, a todos por igual, quedarse sin hacer nada, iba a tener si o si graves consecuencias: Lo primero era que ellos al ya no querer moverse de donde estaban, eventualmente moririan o por hambre, o por frio, lo que ocurriera primero, lo segundo es que su musher, tambien moriria y no volveria ver a su familia, iba a morir aqui, lo tercero, era que la medicina no llegaria a tiempo, de echo no llegaria nunca, y los niños no podrian comabatir por tanto su enfermedad, no lo lograrian, y los hijos de Nome no lo lograrian. Lo peor no era eso, nada de eso, ni siquiera lo ultimo, sino que ellos estaban mas que conscientes de eso, y aun asi, ya no les importaba.

Ya solo se quedaron asi, tal y como acaban de quedar, resignados a morir ahy, sin haber cumplido con su trabajo, solo esperarian, que la muerte llegara a ellos lentamente.

···

Long horse se habia colocado en una posicion lo mas parecida posible a una de meditacion. Estaba analizando lo que acaba de pasar con el trineo, y tratando de formular un plan, aun cuando no deberia tener forma de saber lo que paso.

Long Horse: Balto.
Llamo suavemente.

Balto salio tranquilamente del interior de la cueva, listo para la siguiente indicacion de Long Horse.