28. Nudo

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"Maybe I'm better off dead
If I was, would it finally be enough
To shut out all those voices in my head?
Maybe I'm better off dead
Better off dead!
Did you hear a word, hear a word I said?
This is not where I belong
You're gonna miss me when I'm gone
Gone, gone
This is not where I belong
You're gonna miss me when I'm gone"

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- O M E G A C E M B E R -
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Era un recuerdo interesante, pensaba Atsushi. La primera vez que quedaron anudados su alfa y él, fue en una estación de otoño, y el clima de hoy le recordaba al amor que se declararon ese día. Akutagawa no siempre estaba con él, en aquellos tiempos, fue poco después de haber sido marcado, durante el celo de Atsushi. Estuvieron en cama durante unas horas sin poder despegarse, aquello les avergonzó de cierta forma cuando se miraron a los ojos, llenos de sudor. Con el cuerpo de Akutagawa encima suyo, recordaba que sus corazones podían escucharse por el silencio, Atsushi supo en ese momento lo que significa ser destinado de alguien, se encontró perdiéndose en ese gris intenso que poseía su alfa.

No era el único recuerdo, tenía otros, donde Akutagawa llegaba a su hogar para besarle con desesperación, como si la vida se llevara a Atsushi a la mañana siguiente. Sus memorias se perdieron un rato cuando se despertó en la habitación de su alfa, tapado por el frío y sin su pareja a su lado. No tuvo miedo, creo que fue de las primeras veces que dejó el miedo de perder al mayor. El olor le llevó a la cocina, donde Akutagawa lloraba con un vaso de licor en la mesa, se reprimía lo suficiente para que Atsushi, quien se supone dormía, no escuchara.

El albino se quedó detrás del muro que le separaba a Akutagawa un par de minutos, hasta que cerró sus ojos permitiéndole a su alfa unos minutos de privacidad. Sabía que el otro ya no podía seguir siendo fuerte frente a él, solo podía brindarle su soledad. Regresó a la habitación, sentándose en la cama para volver a sumergirse en su mente.

Desde el primer beso con Akutagawa hasta el primer toqueteo que se dieron en una cita. Incluso recordaba sus mensajes por la madrugada, que ahora yacían dispersos en una alcoba mal acomodada. Akutagawa suspiraba siempre, después de decirle su enfermedad incluso suspiraba más. Temía estar destruyendo la vida de alguien cómo Akutagawa. Y es que, aunque no lo parezca, Ryuunosuke era más sensible de lo que parecía.

Es difícil. Cuando estás en medio de una decisión que podría ser tan cruel como bondadosa, sin saber qué hacer en un callejón sin salida. Ryuunosuke pronto llegó a la alcoba, Atsushi se acostó momentos antes para simular su sueño. Y las mismas palabras que dijo cuando quedaron anudados la primera vez salieron del mayor.

— Que bello eres a la luz de la noche —. Un suspiro más a la cuenta interminable. Y finalmente se dejó poseer por la inconsciencia.

Omegadecember 2021Where stories live. Discover now