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P. Misuk

Luego de salir del hospital, tomé un taxi y me dirigí a la casa de mi querido hermano.

En el laboratorio había sido un poco incómodo para mi, en primer lugar por los pinchazos y también por el doctor que "ayudó" a extraerme la sangre.

No lo voy a negar, me puse nerviosa.

El doctor era lindo.

Pero mi mente no estaba bien para estar pensando en hombres.

Una vez en la casa de mi hermano, fui a ducharme. No sin antes cambiarme el parche de mi brazo por uno que resistiera al agua, tal como Jimin me había repetido tres veces antes de ir a trabajar.

Cuando estuve lista, me cambié ropa y me preparé para desayunar.

Me sentía un poco fuera de lugar estando en el departamento de Jimin, es decir, ahora estaba urgando entre sus cosas buscando algo de comer.

No quería ser una molestia para él, ni mucho menos ser una carga con mis problemas.

Definitivamente tendría que buscar un lugar donde vivir, con el sueldo que recibo en mi trabajo, me alcanzaría para un lugar pequeño pero acogedor.

Mientras desayunaba, busqué en mi celular algunos departamentos que fueran baratos en cuanto a renta.

Habían varias opciones que me gustaron así que decidí sacarle screenshot.











Estaba muy aburrida, demasiado.

Cuando terminé de desayunar, lavé los trastes que había usado y me lancé en el gran sofá en la sala del departamento. De repente mi celular comenzó a vibrar.

Llamada entrante: "amor♡"

Me puse nerviosa de inmediato. Después de lo de ayer, me daban nervios de tan sólo pensar en Bohyun.

Y por Dios, debo cambiar el nombre del contacto lo antes posible.

No alcancé a contestar.

Y muchos mensajes comenzaron a llegar.

"Amor, no viniste a la facultad hoy. Te estaba esperando para hablar, ¿Dónde estás?"

"Te tengo que explicar lo que pasó ayer"

"De verdad necesito hablar contigo"

"Perdóname si te lastimé"

"Estoy preocupado"

"¿Estás en la casa de tu hermano?"

—Bohyun realmente es insólito—Dije en voz baja.

No sabía que responderle. Suspiré y comencé a textear

"No puedo creer que estés enviando
estos mensajes. Te dije ayer que no quería conversar contigo. Dame tiempo, por favor. Y no, no estoy en la casa de Jimin. Adiós Bohyun, tengo cosas que hacer"

Leyó el mensaje de inmediato.

Llamada entrante: "Bohyun"

Otra vez.

Rodé los ojos y colgué la llamada.

Encendí la televisión y mi celular volvió a llamar, contesté sin ver quién era.

—Hermanita, ¿cómo estás? ¿ya comiste algo?

Oh, era Jimin. Y yo pensando que era Bohyun.

—Estoy bien, y sí, ya comí. Aunque ahora estoy un poco aburrida

—Oh, yo no tengo tanto trabajo ahora, tengo unos minutos libres y aproveché de llamarte

—Tú siempre tan atento, hermanito

—Obvio, tengo que ser así con mi hermana favorita

—Literalmente soy tu única hermana, Jimin

—Aunque seas mi única hermana, eres mi favorita— Escuché una risita de Jimin— Te llamaba también para contarte dos cosas

—Dime

—Bohyun me escribió, para preguntarme dónde estabas, aunque aún no le respondo.

—No le respondas, por favor, que a mi igual me escribió y llamó pero no quiero hablar con él, no por ahora

—Está bien, respeto tu decisión, pero como te dije en la mañana; deberías denunciarlo. Te hizo daño físico y esto no se puede quedar así.

—Lo haré

—Lo otro que te quería contar, es que hoy en la tarde algunos compañeros de trabajo quieren ir a beber a mi departamento, ¿pueden?

—Jimin, es tu departamento, no tienes que pedirme permiso

—Pero igual, tú estás ahí y no quiero que te sientas incómoda, menos con lo de ayer

—No tengo problema Jimin, yo me quedaré en la habitación y no molestaré nada.

—Está bien, creo que Jungkook llegará antes porque hoy tiene día libre, a comparación de nosotros. ¿No te molesta tampoco, cierto?

—No, obvio que no Jimin

—Bien, entonces nos vemos en la tarde pequeña

—Adiós

—Te quiero

Y colgó la llamada.

Fui a la habitación y decidí ordenar un poco. La habitación de Jimin estaba perfectamente ordenada, incluso la cama estaba tendida así que solamente ordené la que sería mía durante unos días.

En la tarde tomé mi laptop y me dediqué a estudiar.

Ingeniería es complicado, pero me gusta mucho.

No me di cuenta que habían pasado horas, eran pasadas las seis de la tarde y yo no había almorzado nada.

Decidí sacar unas frutas del refrigerador e hice un tutti frutti. Al menos para "matar el hambre"

Comí y lavé lo que había usado.

Me asusté cuando sentí el timbre del departamento, ¿Quién sería a esta hora?

Jimin dijo que su compañero de trabajo llegaría, pero no pensé que sería ahora.

touch your heartWhere stories live. Discover now