✱Capítulo 20. La verdad: soy un ángel

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Empecé a sudar como loco. Louis vio besarme con alguien más y eso no era para nada bueno. Nosotros no éramos novios, pero teníamos algo especial y si él hiciera algo parecido yo me sentiría muy mal.

Khloe me miraba con cara de estúpida y los demás aplaudían y nos gritaban muchas tonterías. Volví a ver a la salida y Louis ya no estaba.

Comencé a caminar a paso rápido hasta la salida, pero Khloe me comenzó a seguir.

-¡Harry! ¿A dónde vas? ¿Estás apresurado? -se escuchaba su voz atrás mío.

Mi respiración iba cada vez más pesada y mi paso igual. Lo único que quería hacer era encontrar a Louis. Me sentía pésimo. Me sentía tan mal.

Pero Khloe no tenía la culpa, así que le tuve que explicar.

-Mira, Khloe -me detuve por un momento-. Ha sido hermoso lo que ha pasado, pero necesito llegar a mi casa, ¿sí? -ella me miraba con sus inmensos ojos, batiendo sus pestañas, asintiendo lentamente.

Como vi que no me iba a responder, seguí caminando.

Louis no se encontraba en la salida. Mis ojos buscaron por todos lados y no encontraba una mata de cabello despeinado y ojos azules deslumbrantes. Mi corazón latía rápido. Necesitaba verlo.

Me subí a mi coche y manejé con velocidad máxima hasta mi casa, con la esperanza de que él se encontrara esperándome ahí.

Tan pronto llegué, me bajé rápidamente y entré a mi casa. En la planta baja no había nadie.

-¡Louis! -comencé a gritar-. ¡Louis! ¡¿Louis estás ahí?!

Al notar que no tenía respuesta, subí las escaleras. Lo primero que hice fue entrar a mi habitación. Todo estaba normal como siempre. La ventana estaba cerrada, y como un clic, corrí a abrirla.

Me rendí. Louis probablemente estaba enojado conmigo por haber hecho aquello. Ahora me sentía la persona más miserable del mundo y todo por curiosidad; por algo que probablemente sólo sean cosas de mi imaginación. Admito que me siento inseguro ante Louis. Él era muy misterioso, y desde que esa secretaria me dijo que Louis no estaba en el instituto, comencé a sospechar.

También era muy extraño que él no le gustaba salir en público conmigo. También era extraño lo de la foto. También era extraño sus repentinas apariencias. También era muy extraño su actitud, y cómo olvidar aquello sueño que tuve con el enfermero del instituto, que me debilitó por un día. Louis parecía conocer a ese tipo, pero la verdad es que todo daba vueltas en mi mente como para comprobarlo.

Me tiré en mi cama y saqué mi móvil. Le envié un mensaje de texto a Louis. A la vez, vi uno de Danielle y se me ocurrió pedirle que hiciéramos videollamada. Necesitaba hablar con ella de lo sucedido.

*****

A la mañana siguiente, fui al colegio. Al entrar, los grupitos de personas por los que pasaba, cotilleaban y se reían de mí, supongo. Aquella gente no era para nada disimulada, pero a mí no me importaba. Así era la sociedad: si haces algo, hablan de ti. Si no se haces nada, hablan de ti.

Vi a un chico correr hacia mí con una gran sonrisa y dijo:

-¡Felicidades, hombre! ¡Eres la noticia del día! -él me palmeó en el hombro.

-¿Por qué? -fruncí el ceño. Ese chico era un año menor que yo. Sí lo he visto, pero jamás habíamos hablado.

-Esto -me mostró su celular y en ella había una foto de un corazón y adentro una foto de Khloe y yo besándonos. Eso me dio asco y vergüenza, por lo tanto hui.

Uncover {Larry Stylinson}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora