Capítulo 5

418 28 2
                                    

Trato de mantener mis ojos abiertos, pero siento que se van a cerrar en cualquier momento, y la voz tan pacífica de la profesora que parece como si estuviera cantando una canción de cuna no ayuda en nada. Y claro como no voy a estar así si ayer me dormí super tarde.

- ¡Señorita Gardner si no le interesa mi clase se puede retirar! – exclamó la profesora- No estoy hablando con la pared, así que la puerta esta más que abierta para usted.

Y claro tenía que nombrarme, es el segundo día de clases y ya tengo un regaño. ¡Felicidades Karen!

-No profesora, lo que pasa es que....

-Lo que pasa es que nadie puede estar obligado a estar en una puta clase de mierda, y menos con usted- exclama Michael parándose de su puesto, camina hacia mi dirección.

Pero que está haciendo.

-Si nos disculpa, nosotros nos vamos- me agarra de mi brazo sacándome de clases.

-Te has vuelto loco, oye suéltame- exclamo tratando de zafarme.

No responde solo se digna de caminar hacia el campus. Me suelta cuando llegamos a las gradas.

- ¿Acaso te volviste loco? – exclamo.

-Solo te hice un favor, eso no era lo que querías.

-No, claro que no, no puede ser van a llamar a mi padre- lo último lo susurro preocupada.

-Relájate. ¿Quieres?, solo nos saltamos una clase no es para tanto-responde relajado.

- ¿No te importa?

-Me importa una mierda- responde mirándome.

- ¿Ni te importa que llamen a tus padres? – pregunto.

Su expresión cambio por completo, y dejo de mírame.

-Mis padres murieron- responde seco.

Me quedo sorprendida lo que dijo, la verdad que no pensé que diría eso. Me dio mucha pena se lo que se siente no tener padres, aunque los míos siguen vivíos es como si estuvieran muertos, una madre que me abandono, y en padre que ni la sombra se deja ver.

 -Yo en verdad lo siento.

- ¿En verdad lo sientes? – pregunta con un tono diferente como si fuera sarcasmo.

-Claro, ¿Por qué te mentiría? - respondo enseguida.

Sacó de su bolsillo un cigarrillo encendiéndolo para comenzar a fumar.

-Como sea- regresándome la mirada- ¿Acaso a ti te importa lo que diga tu padre?

Me cogió esa pregunta de sorpresa, la verdad es que cuando estoy con mi padre trato de verme fuerte ante él, que no sea un impedimento para mí, pero la verdad es que le tengo respeto y de cierta manera miedo, es un señor de carácter fuerte y aunque nunca me ha alzado la mano me da miedo de como puede reaccionar en ciertos temas, tal vez porque no he tenido una conversación amistosa con él.

-Bueno...

-Si no quieres estar en un lugar nadie te puede obligar a estarlo, nadie te puede obligar hacer algo lo que no quieres Karen.

Esta tan cerca de mí que puedo apreciarlo tan bien, puedo oler su perfume varonil mesclado con el humo del cigarrillo. Aguanto el olor solo para no alejarme de él, no quiero alejarme.

- ¿Gustas? – pregunta extendiéndome el cigarrillo.

Me quedo paralizada no sé qué decirle.

-Yo....

-Esta bien, entiendo, pero si un día te animas solo dime- responde expulsado el humo.

- ¿Te gusta mucho fumar?

Arrástrame A Tu Oscuridad [✓] Libro#1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora