Período en un tanque de tiburones

753 41 42
                                    

Harry estaba aburrido.

Usualmente él hacía su viaje a la casa de Louis pero él estaba pasando el día con Marina. Marina había afirmado que "Harry estaba acaparando a su único amigo y merecía algo de tiempo con Louis también, tú sobreprotector novio soñado."

Así que Harry se quedó solo, cansado y de mal humor en su dormitorio.

Sus padres habían hecho una nota mental de no molestarlo porque sabían que era lo mejor. Se habían resignado en solo hablar con él de vez en cuando, que es de hecho exactamente lo contrario de lo que Harry había querido. Él simplemente estaba ahí para ellos, y había aprendido a aceptarlo.

Harry no podía dejar de pensar en que quería pasar el resto de su vida con Louis. Él era la única persona que realmente lo entendía y no lo juzgaba (sin tener en cuenta sus primeros encuentros, por supuesto). Pero también sabía que era demasiado joven para ese tipo de compromiso. Quería esperar, a pesar de que estaba casi seguro que el era él elegido.

Al otro lado de la ciudad, Louis estaba en casa de Marina, chismeando sobre cualquier cosa y hablando de todo lo que debían hablar. -¿Te he dicho acerca de ese nuevo chico en mi clase de finanzas? Su nombre es Luke y tiene los ojos azules más bonitos que he visto nunca -dijo Marina emocionada, y Louis casi se podía imaginar la baba imaginaria saliendo de la boca de su amiga.

-Oh sí, él es muy lindo -Louis asintió, metiéndose otro monstruoso puñado de chips -patatas- a la boca.

Marina le dio una mirada confundida. -Espera, ¿lo conoces?

Louis levantó una ceja. -Por supuesto que sí -intentó decir, pero a través de su boca llena de comida salió algo así como -aro que sí.

-Lo siento, no hablo como cavernícola.

-Ve a tener tú período en un tanque de tiburones.

Los dos continuaron discutiendo juguetonamente cuando el tema de Harry de alguna manera salió al aire. -Las cosas están bastante serias, ¿eh? Quiero decir, tuve que pagarle para que prácticamente te dejara venir hoy -dijo Marina con falso fastidio.

Louis frunció el ceño. -¿Supongo que sí? Quiero decir, yo no he pensado mucho en ello -estaba sorprendido por la manera en que salió tan fluida esa mentira de su boca, pero no quería parecer uno de esos chicos que están locamente enamorados a una edad tan joven. No era conocido por eso. Se supone que es un rompecorazones.

-Espera, ¿hueles eso? -preguntó Marina, oliendo por su nariz y arrugando las cejas.

-¿Qué?

-Huele a mentira. Sé que ustedes están, como, locos de amor y tú solo tienes miedo de admitirlo porque Dios sabe por qué. Si no se casan entonces yo podría ahuyentar a todos tus novios después porque cariño, este chico no se irá a ningún lado en mucho tiempo.

Louis resopló, dándose la vuelta en la cama de Marina con una sonrisa satisfactoria. -Yo no estaba pensando en dejarlo ir a él de todos modos.

Y fue entonces cuando casi se lo admitió a su amiga. Estaba enamorado. Había encontrado a la única persona en todo el mundo que se merecía su amor. Y en sí, era aterrador y hermoso a la vez.

Estaba enamorado de un idiota, pero por una vez, ese idiota lo amaba también.

Como se acerca la noche, saltamos de nuevo al otro lado de la ciudad (de nuevo), donde Harry yace enfurruñado en su cama. -Louis dijo que solo estaría hasta las seis -refunfuñó para sí mismo, viendo viejos capítulos de American Horror Story en absoluto aburrimiento.

Tuvo que admitir que si pudiera, felizmente haría el trabajo sucio con Evan Peters. Esta dicho.

Las horas pasaban una a una, y Harry seguía inquieto. Casi había terminado la primera temporada cuando su teléfono comenzó a sonar, lo que indicaba que alguien lo estaba llamando. Encontró que esto era extraño porque nadie lo llamaba a excepción de sus padres, quiénes eran tan antiguos como el sol.

Un nombre poco familiar cruzó por la pantalla y le tomó unos minutos para darse cuenta de quién era. ¿Marina? Cogió el móvil con cuidado, no estando seguro si esto era una especie de llamada de broma.

-¿Hola?

-Harry -Marina respondió, su voz mezclada con pánico y miedo-. Escúchame. Es Louis. Oh dios mío, lo siento tanto, apenas llegué aquí y -

-Marina, ¿Qué pasó? ¡Sólo dime que pasó!

Hubo una larga pausa en la otra línea y Harry oyó su fuerte respiración -que sonaba como que ella estaba al borde de un ataque- y se fueron amplificando muchas sirenas en el fondo.

-Louis ha estado en un accidente grave y yo no sé si va a estar bien.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Nov 09, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

sex addicts [l.s] ADAPTACIÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora