The Survivor. [1]

52. Malfoy manor.

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(Importante saber antes de seguir leyendo: en mi guión especifiqué que los Depp somos magos sangre pura, pertenecientes a los sagrados 28. Tomamos el lugar de los Bulstrode).

Conforme pasaron los días, el ambiente comenzó a alterarse un poco gracias al Yule ball.

—¡Hey Depp! —gritó Bletchley.

—Miles.

—Tú, yo, Yule ball ¿Qué tal?

—Tú, lápida, ahora ¿Qué tal? —escuché a Draco y luego sentí su brazo rodeando mis hombros— hola Bletchley.

—Malfoy —respondió a regañadientes.

—¿No quedó claro que está conmigo? —dijo refiriéndose al conflicto de San Valentín.

—Varios esperamos que termine pronto.

ESE COMPA YA ESTÁ MUERTOOOOOO, NOMÁS NO LE HAN AVISADOOOO.

Sujeté a Draco por los hombros con fuerza, para mi suerte, Blaise y Theo venían dando la vuelta por el pasillo.

—¿Todo bien? —cuestionó Blaise tomando al rubio en mi lugar.

—Todo bien Zabini —sonrió Miles— ¿Cierto Malfoy?

—Ya basta Miles —musité— hablamos luego.

Con arduo esfuerzo, logramos hacer que Draco se tranquilizara y comenzara a caminar lejos de Bletchley.

—Mi propuesta sigue en pie, Depp —exclamó sonriendo tontamente.

Te quería ayudar compa, ni pedo.

Nadie hizo el más mínimo esfuerzo por detener a Draco, se dió la media vuelta y empuñó su varita.

—¡Stupefy!

Aturdido, Miles cayó al piso sin aviso previo.

Draco se acercó a él en paso lento, lo miró despectivamente y piso su mano cuando intentó levantarse.

—Escúchame bien, si sabes lo que te conviene te mantendrás alejado de ella cada que esté cerca. No la mires, no la toques, no le hables con intenciones de cortejarla —se inclinó un poco y lo tomó del cabello— porque si lo haces, me aseguraré de destruirte la vida.

Ama me mié. 🧍

Draco tomó mi mano y comenzamos a caminar.

—Te vas a meter en problemas si te delata —comenté.

—Tiene la boca demasiado floja, hacía falta alguien que lo pusiera en su lugar. ¿Ya tienes las maletas listas?

—Ya casi.

—¿Quieres que te ayude a prepararlas?

—No veo por qué no.

Caminamos a mi habitación, estábamos terminando el primer periodo de clases, así que había tiempo para hacer las maletas sin ninguna prisa.

Al llegar, Draco se sentó en mi cama y abrí la puerta de mi closet.

—Lleva ropa abrigada, en la mansión hace mucho frío.

—Claro.

Saqué un vestido rojo de cuello de tortuga y uno blanco de manga larga.

—¿Blanco o rojo?

—Blanco y lleva tu abrigo café, se ven bien juntos.

Saqué un vestido negro y otro morado, ambos eran de tirantes.