No te vayas, mi amor.

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Jungkook llegaba de la Universidad a las dos de la mañana. Se sentía realmente cansado y solo quería ver a jimin para dormir, sonrió con solo pensar en él aunque borro su sonrisa al recordar que el casi no esta en el departamento por estar con... eunwoo.

Camino hacia la cocina visualizando una nota en el mesón.

"Hola, Jungkook.

Salí con eunwoo a comer y tal vez no llegue esta noche. En el microondas hay ramen y un poco de tteokbokki en el refrigerador. Cuídate.

Jimin"

Otras cosas que habían cambiando en su relación es que jimin ya no lo llamaba por el apodo que le puso cuando eran más jóvenes y tampoco le decía "te amo" o si lo hacía era con la mirada apartada.

Jungkook no era tonto, el sabía que jimin ya no lo quería pero era tan egoísta como pensar dejar a jimin. Calentó el ramen y dispuso a mirar a la nada.

El sabe la tonta frase: "Si lo amas, dejalo ir" esa frase era tan tonta como quién la inventó. ¿No se supone que si amas a alguien tienes que luchar con él? Tal vez si, era un poco masoquista por aguantar rechazos de jimin en los besos o cuando pensaba hacer el amor. Específicamente han pasado siete meses desde la última vez. Desde que jimin conoció a eunwoo.

El microondas paró y abrió la pequeña puerta. Con unos guantes de cocina sacó el ramen y sirvió un poco en un plato, busco un poco de jugo y se sentó en la isla de la cocina a comer. Solo. Sin nadie. Sin jimin. Sin su mundo. Con estrés y problemas de la Universidad.

Luego de unos minutos no quiso más al notarse un poco triste por su relación. Lo extrañaba, joder, extrañaba las sonrisas que le daba cuando despertaban o las que hacía con solo mirarlo, extrañaba sus "Buenos días, kookie" y una sección de mimos que terminaba los dos haciendo el amor. Ahora se conformaba con "Buenos días" y él levantándose de la cama para bañarse y cambiarse en el baño, eso comenzó hace tres meses cuando el le confesó que ya no le gustaba que lo viera desnudo y ahora quería su privacidad.

Se tiro en la cama matrimonial sin quitarse la ropa. Se sentía tan vacía y tan fría. No quería llorar, de verdad no quería hacerlo, hace siete meses hace lo mismo todos los días y parece que jimin no nota eso...

Soltó una risa en seco para tomar la almohada de jimin que tenía su aroma aunque cada día se iba yendo y eso empezaba a afectarle.

Despertó por el ruido de la puerta ya que empezó a tener sueño ligero, cuando estaba con jimin dormía como una roca hasta que jimin lo mimaba para que despertará. Escucho pasos acercarse a la habitación y algo le dijo que se hiciera el dormido.

Escucho la puerta del armario ser abierta y prendas moviéndose, luego cosas puestas en la cama cuidadosamente.

— Jungkook — Escucho la voz de jimin y no se movio — Tal vez este dormido — susurró el.

El sonido del móvil de jimin sonó y este bajo un poco el tono para contestar.

— Woo — dijo jimin al contestar y decidió abrir un poco los ojos para ver a jimin de espaldas revisando su parte del armario — Te dije que iba a buscar cosas en casa. Si, si, espérame allí. No, el esta dormido, tal vez tenga Universidad, no me importa.

"No me importa" tenía ganas de llorar.

— Sí, si — cerró los ojos cuando vio a jimin darse la vuelta — Eunwoo, hablamos de esto ya. El es mi pareja, no puedo dejarla así como así. Entiendo pero tienes que entenderme a mí igual, no es fácil. ¿Es enserio, eunwoo? Ya te dije que no... ¿Para qué? — la melodía de su risa se oyó y casi llorar por sentir paz con aquella — Esta bien, tu ganas... Te amo mas que jungkook.