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No puedo creer que esto esté pasando, no lo puedo creer

Me repito mientras mi jefe y yo nos miramos completamente sorprendidos de encontrarnos en está situación, cabe destacar que yo aun estoy tirada en él suelo y él está en la cama.

─Ava, tú no deberías de estar aquí, ¿tú qué haces aquí? ─ me pregunta a modo de reclamo y me siento muy ofendida.

─¿Yo?, la pregunta aquí es... ¿qué hace usted aquí?─ le preguntó yo levantándome, las piernas me duelen muchísimo ─ usted quién no debería de estar aquí, tiene esposa y ella va a matarme ─ le digo aterrada.

Su esposa está loca, lo se, en más de una ocasión he tenido que intervenir para que no se vaya a golpes con otras mujeres porque según ellas le estaban intentando coqueteando a su esposo.

Y era mentira.

─Ava ─ me llama él pero no le hago mucho caso, estoy en pánico y por lo tanto me estoy riendo cómo una loca.

─Ella va a matarme, de verdad lo hará....su esposa está loca ─ digo caminando de un lado a otro por la habitación, entonces Alexander me tomó de los hombros.

─¡Ava! ─ me gritó sacudiendo me un poco, él susto hizo que dejara de reír, pero ahora tengo hipo ─ Ava siempre me ha gustado escucharte reír, pero ahora no es él mejor momento necesito que te calles para que podamos hablar ─ dice, me gustaría mucho en esté momento concentrarme en sus dulces palabras ahora, pero se quedan en segundo plano, cuando siento cómo algo escurre de enmedio de mis piernas.

─¡Ay Dios! ─ digo saltándome de sus manos caminando a lo que supongo y espero que sea un baño.

─¿A dónde vas ahora? ─ me preguntó siguiéndome.

─A darme una ducha ─ contestó caminando directo a ella abriendo la llave del agua, hipo, está fría pero no me importa.

─No quiero que pienses que llevo haciendo esto un tiempo, está es la primera vez que hago algo como esto y mucho menos estar con otra mujer en mi matrimonio ─ dice él desde él otro lado del vidrio.

Mi corazón se acelera con cierta emoción, me está dando explicaciones, aunque no tiene ninguna necesidad o deber de hacerlo, yo solo soy su asistente. Por otro lado, si sus palabras son ciertas y la verdad no tengo ninguna razón para creer que sean falsas, agradezco a Dios, al destino o a quién sea quién fue él responsable de que él y yo terminamos juntos anoche.

─Siempre lo he considerado un hombre completamente íntegro que la situación en la que estamos ahora me parece completamente irreal, ¿cómo es que terminó viniendo a un lugar cómo esté? ─ preguntó tengo mucha curiosidad por entender.

─Tu mejor que nadie sabe lo mal que está mi matrimonio, mis contantes problemas y discusiones de Addison sus ataques de celos, ya la situación con ella se está volviendo casi insostenible al punto de pensar en él divorcio ─ dice.

Exteriormente estoy completamente sorprendida y pasmada por sus palabras, en lo personal considero que es una decisión que tuvo que tomar hace tiempo. Por dentro celebro completamente que quiera separarse de esa bruja, pero no me hago demasiadas ilusiones, él lo dijo claro, solo lo está pensando de pensar a hacer hay un gran tramo.

─Y ayer, ayer todo parecía salir mal ─ dice con voz cansada ─casi todo él día se la paso discutiendo conmigo de los mismo, él lunes ya te contaran con más detalles de lo que paso, peor en resumen intento echar a nuestra socia ─ me dice.

─¿Que? ─

La reunion que él tenia ayer temprano era con la presidenta de una empresa de telecomunicaciones de en Filipinas, es una empresa nueva, pero con mucha oportunidad, además de que va a beneficiar mucho a la empresa. La presidenta de esa empresa, es una mujer de unos veinte tantos, bonita, inteligente y está comprometida con un importante doctor de su país.

Quiero Un Heredero ◇Herederos Litman 1 ◇Where stories live. Discover now