MY DADDY || PARK JIMIN.

capitulo 37 final: todo.

Mi pecho se ensancha de una felicidad en estado puro. Hoy nada puede salir mal, de eso me encargo yo. Será un día perfecto y es imposible que la sonrisa que llevo plasmada en la cara desde que he abierto los ojos esta mañana desaparezca. A pesar de lo agotada que estaba a causa de los últimos exámenes del semestre me siento con una energía que sobrepasa los límites. Voy por aquí y por allá chillando y dando órdenes y mi familia es incapaz de negarse a obedecerlas o quejarse. Son conciente de lo mal que lo he pasado los últimos meses a causa de su ausencia. Meses que parecen años. Son incapaces de intentar sabotear mi euforia.

Rebecca: sabes que agradezco cada día a Dios por tu regreso a nuestras vidas y justamente es por eso que te quiero pedir un favor. -me mira con los ojos suplicantes y no puedo negarme-

Tú: claro, dime.

Rebecca: ¿podrías hacerme el favor de cerrar tu preciosa boquita? -sonríe y yo niego con la cabeza-

Tú: por supuesto que no, todo tiene que estar perfecto para cuando llegue ¡no Abel! -corrí a toda velocidad a la cocina y le quite de las manos el delicioso postre que Carmina ha preparado para esta noche, lo deje fuera de su alcance donde sé que no corre peligro de terminar en el suelo-

Abel: en cuanto no dejes esa actitud de lado me voy a dar de baja en este proyecto.

Tú: no tienes el suficiente valor para hacerlo. -siseo entre dientes-

Abel: pruebame linda. Pruebame.

Tú: atrévete y me dejas de considerar tu hermana.

Abel: definitivamente te has vuelto loca. -murmura de mala gana- por favor, déjame en paz de una buena vez.

Tú: ¿cómo puedes hablarme de esa manera? -los ojos se me llenaron de lágrimas y no porque sus palabras me hayan lastimado sino por la emociones que estoy experimentando, estúpidas hormonas-

Abel: oye...no llores. -me mira con culpabilidad y trata de acercarse a mí pero doy dos pasos atrás, está vestido con una elegante camisa de vestir manga larga color celeste y lo único que conseguirá será una mancha gigantesca- lo siento cariño, es el estrés.

Tú: ¿crees que voy a desperdiciar lágrimas por ti? -las retiro y trato de controlarme- no vale la pena nene.

Frustrado y sin poder soportarme un segundo más gritó a todo pulmón dispuesto a arrancarse su cabello rubio.

Abel: ¡joder mujer! ¡eres insoportable! -sus ojos se iluminaron al ver por detrás de mí y una sonrisa de oreja a oreja apareció en sus labios- ¡por fin llegas! ¡soportala tú porque yo renuncio! -sale de la cocina a toda prisa-

Me giré para ver al pobre dichoso que tendrá que aguantarme por lo menos unos minutos más. Está de brazos cruzados en el marco de la puerta con su sonrisa socarrona. Guapo como siempre de pies a cabeza, vestido para la ocasión.

Taehyung: deberías haber visto como tus ojos se iluminaron al verme sino te conociera a la perfección me atrevería a decir que pronto declararías tu amor por mí. Te extrañe preciosa. -se acerca y me envuelve entre sus brazos, fue tan rápido que no tuve tiempo de alejarlo para no arruinar su ropa-

Tú: yo también te extrañe. Me alegra mucho que hayas podido venir.

Taehyung: ¿bromeas? ¿Y no ver como mi preciosa chica se vuelve loca? No, no. Jamás.

Tú: la que se va a volver realmente loca es valeria si te escucha decir eso.

Taehyung: ella está conciente que eres especial para mí. Eres mi mejor amiga y además no es por presumir pero no tiene ni un pelo de celosa, por eso me gusta tanto.