Darse cuenta.

1.4K 143 9
                                    

¡Enjoy!.

Lucy miró una vez más su plato. ¿Cómo era posible que lo que antes le era totalmente apetecible ahora le pareciera tan incomible? Estaban en el gremio, y Mira le había servido su comida favorita -por orden de Gray- y ahí seguía la comida: completamente intacta. Lucy suspiró. ¿De verdad tenía que comerse un plato tan enorme y con ahora, personalmente, tan mala pinta?  Realmente no lo quería.

-"Ara, ara. Ahora resulta que sí que es verdad que no tienes ninguna hambre. Y yo que no creía a Gray..."-Comentó Mira, con una gran sonrisa. Lucy sonrió algo entristecida.

-"Lo siento, Mira-chan... Realmente no tengo nada de hambre..."-Se disculpó ella, con la cabeza gacha.

Mira sonrió mientras le guiñaba el ojo derecho, como dándole a entender que no le importaba.
-"Suerte que también es el plato favorito de Natsu. ¿A qué vas a comerlo, Natsu?"-Preguntó, con una sonrisa tranquilizadora. Natsu estuvo a punto de decir algo, pero Mira le interrumpió.-"¿Ves? Natsu se lo come y ya está~"-Comentó sonriente, mientras se iba a atender el bar.

 Lucy se quedó mirando a su amigo mientras le veía comer aquel plato, sintiéndose mal.
-"Lo siento, Natsu. Te has tenido que comer ya varias comidas mías y..."-Comenzó la rubia, nerviosa.

-"¿Porqué te disculpas? Como son para ti, hacen la comida con más cariño. Es decir, tengo la misma comida que yo pido pero mejor acabada y gratis. ¡Así que gracias a ti, Lucy!"-Chilló sonriendo, Lucy, en aquel momento se sonrojó y apartó su vista del dragonslayer, el cual no se dio cuenta de nada.

-"No hay de qué, Natsu".-Murmuró nerviosa.

Gray observó con determinación. Natsu quería a Lucy como Lucy quería a Natsu. Sin embargo, estaba triste: porque aunque Lucy le había comentado su pequeño secreto, también sabía que no iba a confesarse: no quería que el buen rollo que había entre ellos se acabara.

La cosa era que el mago de hielo estaba casi al 100% seguro de que Natsu correspondía a sus sentimientos, ya que solo había que verles juntos: parecían una verdadera pareja. Gray sonrió.

¿Porque eran tan tontos en eso?

De pronto, sintió un instinto terrorífico en su espalda, que reconoció en seguida como la mujer de la lluvia.
-"Gray-sama mira a mi rival del amor..."-Murmuró Juvia.-"¿Podemos hablar en privado? Tengo algo importante que decirte".-Gray solo asintió algo nervioso. 

Simplemente salieron fuera del gremio y Juvia empezó a actuar extraño, asustando al pelinegro.

-"¿Qué deseas, Juvia? No es normal verte tan espitosa..."-Comentó con un semblante serio.

-"¡Gray-sama! ¡Como sé que a Natsu-san le gusta a Lucy-san, y a Lucy-san también le gusta Natsu-san, he decidido crear un plan para juntarlos!"-Comentó sonriente y Gray se extrañó pero después sonrió. Juvia realmente era alguien muy madura.

Juvia se ha hecho amiga de Lucy ya hace tiempo.

-"Me parece bien, Juvia. ¿Cuál es tu plan?"-Preguntó el.

-"Bien, el plan de Juvia es..."-Comenzó a explicar con nerviosismo. Gray solo prestó atención. Realmente quería que Natsu y Lucy acabaran juntos.

Después una reflexión llego a su mente.
Si a Juvia le pasará esa misma enfermedad como a Lucy, ¿Como se sentiría el?
¿Sería muy tarde como le esta pasando a Natsu?

Tal vez...

-Juvia...-Explicó el pelinegro en un susurro, y Juvia abrió los ojos como platos.




Triste realidad. (Disnea Mágica) |Nalu|Where stories live. Discover now