Twisted wonderland: Las aventuras de un cisne y sus amigos

04

Apodo

Riddle Rosehearts se consideraba alguien con un juicio maduro que intentaba mejorar sus errores del pasado de a poco. Aún así, algo lo comenzó a molestar desde que la reunión de líderes de dormitorio para la organización del VDC...

—¡Hey, Riddle!

—Kalim, te he dicho varias veces que no corras en los pasillos. —regaño el pelirrojo.

—Ajaja lo siento, lo siento. —se disculpo el albino con una sonrisa— Solo quería preguntarte si querías ir a la fiesta en Scarabia ¡Tendremos mucha comida deliciosa y música que te hará bailar hasta la anochecer!

Rosehearts suspiro—Ustedes si que tienen bastante tiempo libre para hacer fiesta casi todos los días. Deberías preocuparte más en tus calificaciones que en divertirte.

—¡Vamos Riddle, será divertido! Hasta Dede y Grim vendrán.

—¿Dede? —pregunto confundido pues no conocía a ningún estudiante que se llamará así.

—Odette, por supuesto. —contesto el de turbante parpadeando sin dejar de sonreír.

—¿Por qué la llamas así? Tiene un nombre, después de todo.

—¿Por qué? Es normal llamar a alguien que te agrada por un apodo ¿No es así?

—¿E-es así? —tartamudeo sorprendido—...No lo entiendo ¿Por qué demostrarias con un nombre raro?

—Mmm, no sé cómo explicarlo pero, creo que al llamarse así es una muestra de lo cercanos que son. —comento el ojicarmesi con golpeteos en su barbilla— y claro, el aprecio que se tienen.

Esas palabras hicieron que los papeles que Riddle sostenía entre sus brazos se cayeran a suelo.

—Eso quiere decir, ¿Que Odette y yo no somos tan cercanos como creí?

La joven solía ir a las fiestas de no cumpleaños que se festejan en Heartslabyul y, sin mencionar, que lo ayudaba a comunicarse mejor con los erizos que parecían adorarla cada vez que la veían. Y no los culpaba, su forma de ser simpática con los demás era su sello personal. Pero ahora dudaba que fueran tan unidos como pensó.

Comenzó a prestar atención a como otros se dirigían a ella en especial, los líderes de otros dormitorios. Y vaya sorpresa se llevó al escuchar cómo cada uno tenía su forma de dirigirse a la única chica...

—¿Por qué te tomo el pelo? Porque es divertido ver tu cara de tomate, Ratoncita.

—Que grata sorpresa de verte por aquí, Perla.

—¡Prueba esto, Dede! Jamil hace el mejor estofado del mundo.

—Llegas en buen momento, paloma. Necesito que alguien me ayude a llevar estás bolsas a Pomefiore.

—¡Hi!¡T-T-Te-Tenshi-shi...!

—Vaya, vaya, pero si es la pequeña bestia.