20. "Traerlo de vuelta"

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Ingrid abrazaba a su hijo que no había parado de sollozar durante gran parte de la noche. Sabía que Oliver siempre tenía problemas al controlar o expresar su emociones, por ello las evitaba así que solamente se limitó a acariciarle el cabello hasta que él estuvo más tranquilo como para hablar.

—¿Vas a decirme qué sucedió? ¿Porqué estás tan triste, Oli?

—Maté a mi amigo... Yo no quería matarlo, pero él me lo pidió. 

—¿Por qué te lo pidió? –Oliver suspiró mirando el techo.

—Él estaba cansado de vivir, pero no tenía el valor de suicidarse... Me rogó que lo matara y aunque yo no quería, lo hice. Pero ahora quiero a mi amigo de vuelta...

—¿Cómo lo mataste?

—Lo estrangulé, esperaba que se arrepintiera para soltarlo pero no lo hizo, me frustré y no medí mi fuerza... Le rompí el cuello –se llevó una mano al abdomen y palpó levemente su herida.

—Oliver, sabes que yo puedo hacerlo... Puedo revivirlo.

—Si, lo sé. Pero no sería justo para él... Ashton tomó la decisión consiente de morir, a pesar de que yo le ofrecí traerlo aquí donde estaría a salvo, no quiso.

—Espera ¿Ashton? ¿Ashton Banks? –Oliver la miró extrañado.

—¿Cómo es que tu sabes su nombre? –Ingrid suspiró.

—Ay, Oliver... Su padre y su tío nos ayudaron a rastrear a Blood King a cambio de ayudaros a buscar a su hijo... ¿Sabes quien es el padre?

—Si... Me preguntó si sabía donde estaba él...

—¿Qué vas a hacer? Su familia tiene derecho a saber qué le pasó. Y lo sabes.

—Si, lo sé... Debo decirles... Y llevarlos a donde esta Ashton... 

—También debes decirles que podemos revivirlo.

Oliver se levantó y a pesar del dolor de su herida se puso a caminar hacia una de las repisas donde había una fotografía enmarcada.

—Querrán hacerlo sin pensarlo... Sin pensar en él...

—¿Ellos no sabían del estado de su hijo?

—No, Ashton nuca se lo dijo a nadie... Pero dejó una carta –dejó la fotografía de él y su hermano mayor Kaleb y se encaminó al armario –. Debo ir por ella.

—Oliver, aun estás muy mal. Deberías descansar. Keyla te va a matar si se entera que saliste aun herido.

—Regresaré pronto –se colocó una chaqueta y caminó hacia la puerta.

—Espera –miró a su madre –. No evitaré que vayas, pero no te dejaré ir solo. Busca a Dylan, dile que te acompañe –Oliver torció los labios en una mueca pero asintió.

Salió de la habitación y en total silencio recorrió los pasillos de las habitaciones hasta llegar a la puerta del rubio. Tocó un par de veces y la puerta se abrió.

—¿Oliver? ¿Qué sucede? –no se veía cansado, había estado despierto.

—¿Estás ocupado?

—No, Iris y yo estábamos viendo una película pero ella se quedó dormida ¿Qué pasa?

—Necesito que me acompañes a La Casa. Debo traer algo, no tardaremos mucho –el rubio asintió y volvió a entrar a ponerse sus zapatos, una chaqueta y de paso le colocó una manta a su novia, caminó y salió de la habitación.

Dylan no preguntó absolutamente nada sobre lo que estaban haciendo, en cambio tomó uno de los autos y bajo las ordenes discretas de la presidenta, ambos salieron de la fortaleza con dirección a La Casa. Sin embargo, la curiosidad lo venció eventualmente.

Oliver ||TERMINADA||Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang