Capítulo Final

25.5K 2.3K 136
                                    

—Despierta, Luciana

Abrí mis ojos sobresaltada, frente a mí estaba la bruja, me miraba seria; yo estaba sentada sobre una silla y no podía moverme, pese a que, no había ataduras en mi cuerpo. Me encontraba en un lugar que no conocía. La habitación era totalmente desconocida para mí.

—¿Qué me hiciste?

—Te inmovilicé, no te preocupes, cuando terminemos de hablar te liberaré —dijo en un vano intento por tranquilizarme.

—¿Qué es lo que quieren? ¿Por qué nos hacen esto? —Articulé desconcertada y temerosa. No sabía donde se encontraba Marcus.

—Porque odiamos a los vampiros y tú eres una bruja, no debes estar con él —simplificó, como si eso pudiera justificar lo que hacían.

—¡Yo no era una bruja! —Increpé— ¡Tú me convertiste en una!

—Estaba en tus venas, Luciana, yo solo ayudé a que despertara —espetó.

—¿Dónde está Marcus?

—Está en un calabozo en el sótano —respondió. Cerré momentáneamente los ojos.

—¿Qué van hacernos? —Indagué, incluso al no querer escuchar una respuesta.

—A ti, nada. Nosotros no dañamos a nuestras iguales —declaró. Quise reírme en su cara, pero sabiendo lo que me convenía, me mantuve tranquila.

—¿Y a él?

—Lo matáremos, lo devolveremos al infierno donde pertenece —me hizo saber con toda seguridad. Temblé de terror.

—¡No! ¡No te atrevas a tocarlo! —Grité furiosa.

—¿Lo defiendes? Después de cómo te ha tratado, no puedo creerlo. Me decepcionas, Luciana. —Una mueca despectiva surcó sus labios.

—No era mi intención hacer lo contrario —repliqué asqueada con su persona.

—Da lo mismo —le restó importancia, caminando lentamente frente a mí.

—Por favor, te lo suplico, déjame verlo —pedí, necesitaba cerciorarme con mis propios ojos de que él se encontraba bien.

—No —fue tajante. Me desesperé.

—¡Yo lo amo! ¿Por qué no lo entiendes? —Increpé entrando en pánico. No había nadie que pudiera ayudarnos.

—No puedes amarlo. ¡Es un monstruo!

—¡Él es mi vida! No puedes decirme cómo vivirla, ni a quien amar —aseveré con la voz rota—. Por favor... no lo lastimes.

Ella permaneció callada unos momentos, sólo el sonido de mi llanto llenaba la habitación donde me tenían.

—Te daré dos opciones, Luciana, porque me doy cuenta que de verdad lo amas —dijo al fin, la escuché atenta—. La primera, que debo decir es mi favorita, es matar a Marcus Vladek.

—No —dije segura.

—La segunda, es borrar su memoria —añadió. Tragué en seco.

—¿Qué? —Inquirí sin poder creer lo que me decía.

—Sí Luciana, como escuchaste. Borraré la memoria de ese vampiro, cada recuerdo y detalle tuyo, como si jamás hubieras existido para él —explicó. Mi labio inferior tembló.

—¿Por qué me haces esto?

No podía aceptarlo, si ella hacia eso, Marcus se olvidaría de mí para siempre de que me amaba, de nuestro poco tiempo juntos, de nuestro amor.

Enamórate de mí ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora