Capítulo 2: [Funcionario real]

681 105 8
                                    

Capítulo 2: [Funcionario real]

Frey estaba en una encrucijada. Cuando abandono la guarida del dragón, Lenoir. Pensó que no sería complicado llegar hasta el palacio del príncipe Alberu. Personaje importante en la historia que había leído.

Pero estaba equivocada.

Fue fácil aprobar el examen, la mayoría de los plebeyos no podían ser funcionarios aun cuando estaba abierto a todo el público, más que nada debido a la educación totalmente distinta de un noble. Por lo que su enseñanza en el mundo moderno era muy útil.

Los ministros a cargo no supieron que pensar cuando una plebeya, mujer, joven y de dudosos antecedentes aprobó. Superando a la calificación más alta del sobrino del Duque Orsena.

Quienes eran los nobles más influyentes de la región central de Roan.

Esa plebeya, llamada Frey Blair había obtenido un puntaje perfecto.

Lo que le había ganado el resentimiento de los jóvenes nobles.

Pero a la joven en cuestión no le importaba. Desde que había obtenido ese cuerpo de dragón mestizo, podía aprender de todo con mayor facilidad, supuso que el cerebro en su cráneo era una cosa totalmente diferente de su antiguo cerebro humano. Lo que le permitió absorber conocimientos a un nivel abismal.

—Novata. —Frey giro la cabeza del libro de cuentas de la cocina del segundo príncipe que estaba revisando. —Lord Orsena quiere té.

Estaba un tanto harta. No había hecho todo ese esfuerzo en convencer al dragón celeste si hubiese sabido que se convertiría en una sirvienta. Tenía una ilusión en su cabeza sobre ayudar a sus amados personajes, pero eso parecía cada vez mas lejano.

En los dos meses que llevaba como funcionaria novata solo hacia trabajos menores, el trabajo de otros y agasajar a todos esos ricachones pomposos.

Podía hacer más, Pero no la dejaban.

¿Es porque no vengo de una familia noble?

Levantándose de su asiento en la calurosa cocina se resignó a servir el dichoso té.

—Te ves bien campesina, las mujeres ignorantes deben aspirar a ser lo que pueden ser, en tu caso una mucama. No una funcionaria real. Aprende tu lugar.

Un seguidor de Edmund Orsena se cruzó de brazos hablando con la nariz muy respingada.

Frey miró su reflejo aburrido en el líquido de la taza. Pensó en tirarlo sobre el chico, pero no valía la pena, sería un desperdicio de buen té. Sin contar que estaba acostumbrada a la discriminación de sus compañeros de trabajo.

No valía la pena.

Si había algo que lamentar, era que en todo ese tiempo no pudo ver un solo mechón de cabello rubio del príncipe Alberu.

Eso sí que era triste.

Frey suspiro con desolación, con una expresión de derrota. Lo que el secuaz de Edmund Orsena interpretó mal. Una sonrisa de satisfacción se dibujó en su rostro al pensar en que le enseñó una lección a la arrogante plebeya.

Ajena a todo el teatro mental de la otra persona, Frey fue a la oficina que ocupaba Edmund temporalmente.

El hombre se encontraba leyendo documentos junto al secretario del segundo príncipe. Era increíble lo que las conexiones podían hacer por algunos.

—Mi Lord, espero que la próxima semana cuando se den a conocer las asignaciones para los funcionarios de este año, usted quede con el segundo principe. Sería de mucha ayuda en este palacio.

El rostro imperturbable de Edmund continuó igual, ignorando a una persona que tenía un cargo mucho más importante que él. Pero claro, era un Orsena.

Frey se aclaró la garganta, el secretario la miro feo, pero no le importo.

— Su té —Sonrió dulcemente al joven, Edmund la miro a través de sus gafas redondas de aspecto caro. —Haces mucho ruido.

—¡Estamos trabajando! Esto no es un gallinero, niña.

Con los ojos entrecerrados Frey se fue. No sabía a qué lugar la asignarán, eso le preocupaba. ¿Qué haría si no podía estar con Alberu?

De todas maneras, ella podía trabajar por el bien del reino desde otro palacio. Tenía que ser positiva se dijo con el corazón abatido.

(...)

Tenía 5 meses en ese mundo. Pero como nadie hablaba del protagonista, supuso que aún no pasaban los acontecimientos de la obra original.

Se encontraba fuera de la oficina del secretario del primer ministro, esperando escuchar su asignación definitiva. Tenía su maleta junto a la falda de su vestido. Los demás funcionarios novatos esperaban ansiosamente con sus sirvientes el traslado definitivo.

—Lord Edmund Orsena será asignado como el primer asistente del tercer príncipe.

Como era de esperarse. El sujeto con buenas conexiones y el segundo puntaje más alto de los exámenes consiguió el puesto que la mayoría en ese lugar quería.

Todos menos Frey. Ella quería a Alberu como jefe. Tenía los dedos cruzados con el corazón acelerado.

Cuando los nombres siguieron pasando, su paciencia se fue volviendo más delgada. ¿Cuándo sería su turno?

—Disculpe...—Un sujeto de mediana edad interrumpió los pensamientos de Frey, quien se dio cuenta que era la última fuera de la oficina.

—Quería disculparme con la señorita —el hombre suspiro abatido. —...merecía una mejor asignación, con su puntaje perfecto.

Sostenía tan fuerte los papeles en sus manos que Frey se temió lo peor.

—Señorita Blair. Ha sido asignada como la segunda asistente de su alteza, el príncipe heredero.

Frey grito internamente con un rostro en blanco. 

...

Notita: Solo quería mencionar que Frey llegó un año antes que nuestro hermoso Cale-nim. Así que todavía no pasa lo de ciertas bombas.

Así que esperen ese momento, pero sin muchas expectativas. Ver a cierto pelirrojo va a ser difícil. ¡Es Cale!

You are not trash [Cale Henituse] Trash of the count's familyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora