A sus 19 años, Nayeon debería estar apoyando a su banda favorita, yendo a centros comerciales a mirar la ropa de temporada que ha llegado, o estar juntando dinero para su graduación de preparatoria. Pero no, a sus cortos -o largos- 19 inviernos, Im...
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La castaña omega guarda los libros necesarios en su mochila. Cuando va saliendo de la biblioteca, se despide de la encargada. En sus manos tiene un hotdog, uno que Mina tuvo la decencia de hacerle después de dejarla sin cenar la noche anterior. No sabe de dónde la alfa saca dinero o comida, pero mientras tenga que comer, está bien.
Quita el papel aluminio en el que el perro caliente está envuelto. Está a punto de darle la primera mordida cuando un olor fuerte a alfa la rodea, es almizcle y agradable para su nariz.
"¡Nayeon, espera!" Yuto, un alfa, se acerca a ella, por sus espaldas. Es un primo de Mina y un año menor a ellas. "Tengo que darte esto"
"Buenas tardes, Yuto" le habla amable.
Por lo que el más bajo sabe, Yuto era un alfa amable y bueno como Tzuyu. Así que por eso Nayeon se siente tranquila de tenerlo cerca. Sus ojos son verdes claros y su cabello es de un color rubio, mientras que su piel es de un tono parecido al de Tzuyu. Tiene la cara bien marcada, pero sus facciones de chiquillo no se pierden.
"Buenas tardes, Nayeon. Mira, la señorita Kim te envía esto" le entrega un papel bien doblado. "Si aceptas, debes firmar ahí, en la línea de abajo"
Nayeon la abre y es una nota, donde la maestra le pide de favor a la omega darle asesorías a Yuto de álgebra. Nayeon tuerce sus labios, mirando el rostro esperanzado del rubio.
"¿Qué tanto lo necesitas?" Muerde su hotdog y habla con la boca llena.
"Bastante. Este no ha sido mi mejor semestre"
"¿Cuál es la calificación de tu último examen?" Se apoya en una pierna, mirándole fijamente.
"Un... 25 de 100"
"Estás jodido"
"Gracias" se ríe. "¿Entonces?"
"Está bien, lo haré. Ehh..." se mueve, buscando donde dejar su comida. "Detenme esto un momento"
"Claro" el chico lo toma, sonriendo.
"¿Tienes un lapicero?"
Yuto asiente, buscando en el bolsillo de su mochila. Saca uno de tinta negra y se lo pasa a Nayeon. Mira como la omega firma con dificultad, apoyando en su mano.
"¿Es todo?" Toma de vuelta su comida y pone una mano en su estómago. Sólo quiere llegar a casa y dormir.
"Ajá" mueve su cabeza de arriba a abajo, luego sonríe viendo el marcado vientre de Nayeon. "¡Wow! Está creciendo. Jamás pensé que Mina llegaría a tener bebés. La tía Taeyeon está furiosa"
Nayeon tuerce los labios. Lo sabía, porque el día que Mina le dijo a su madre, ella estuvo ahí. Y la trató como la peor basura del mundo. Dijo que era una omega fácil y aprovechada.
"Créeme que lo sé" muerde el último pedazo de la salchicha.
"Pero tranquila, Jessica está feliz de que su hija haya encontrado a su omega"
