A sus 19 años, Nayeon debería estar apoyando a su banda favorita, yendo a centros comerciales a mirar la ropa de temporada que ha llegado, o estar juntando dinero para su graduación de preparatoria. Pero no, a sus cortos -o largos- 19 inviernos, Im...
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Miyeon, una omega, acomoda su blusa para que su escote luciera más. Arregla su cabello -lo lacio hoy por la mañana- frente al pequeño espejo que tiene dentro de su casillero. Se aplica brillo labial por último y cierra la puerta, dirigiéndose a donde está cierto alfa azabache, acomodando sus cosas.
"Hola, Mina" pasa sus manos por sus pantalones ceñidos y sonríe.
La ojiverde la mira, pasando su vista por todo su cuerpo, luego parpadea un par de veces y vuelve a su tarea de ordenar sus libros. Su rostro es neutro, sin ninguna expresión especial, pero su mandíbula está apretada fuertemente.
"Mi celo se acerca... Y me preguntaba si-"
"No" cierra su casillero, poniéndose la mochila sobre el hombro.
"Pero-"
"Muévete, necesito resolver algo" habla grueso y ella, asustada, se hace un lado.
Mina camina, con humo saliendo de sus orejas, gruñe internamente cuando su alfa también lo hace, celosa ante la escena frente a sus ojos. Nayeon está abrazando a Yuto, ella desconoce la razón, no la quiere conocer. Pero lo que sí quiere es que se suelten en este mismo instante.
"¡Mina!" Nayeon chilla cuando es jalada hacia atrás. La reconoce por su olor y brutalidad.
"Mierda, Mina, puedes lastimarla así, o al bebé" su primo dice, alarmado.
"Nunca le haría daño a mi cachorro" olfatea el cabello de Nayeon, lo más discreto que puede.
En los últimos días, su olor se había intensificado, volviéndose más dulce y adictivo. Era eso o que cada vez su celo estaba más cerca.
"Como digas" la omega se aparta, arreglando su cabello. "Estaba hablando con Yuto de su cumpleaños"
"Haré una fiesta, el viernes de la próxima semana, daré invitaciones y eso"
"¿Por qué te abrazaba?"
"Porque quise" cruza sus brazos, desafiante. En realidad, parecía más un gatito rogando por caricias que algo intimidante.
"Ajá, sí, vamos, Nayeon" Mina toma de la mano a la castaña, comenzando a caminar.
"¡Nos vemos después, Yuto! ¡Para la asesoría!" Le grita, siendo arrastrada por el pasillo. "Me lastimas el brazo" se suelta del agarre fuerte de la alfa.
"Lo siento"
"Eres muy brusca, no quiero que seas así con el bebé"
"No lo seré"
Nayeon hace un ruido, no muy segura.
"¿Por qué te molesta verme con tu primo?, es mi amigo" soba su brazo.
"Porque no me gusta"
"Pero no es-"
"Me pone celosa, ¿ya?" Revela, con los ojos oscurecidos.
