Un guerrero Berserk en Eostia.

Capítulo 4: sobrevivir en este mundo cruel.

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Capítulo 4: sobrevivir en este mundo cruel.

(Salto de tiempo, en el castillo de Celestine).

Ya habían pasado varios días, y ahora era de conocimiento público la existencia de la banda mercenaria llamada los perros negros, quienes habían atacado pequeños poblados en las lejanías, también conociéndose las perversas intenciones que ellos tenían hacia las mujeres de toda Eostia.

Celestine junto con las demás princesas, habían pactado una alianza entre ellas para tratar de derrotar a los perros negros de Vault, después de eso, se supo que el reino de Olga, la reina de los elfos oscuros había sido atacado y destruido por los perros negros, Celestine había mandado un equipo de reconocimiento después de esperar un tiempo para saber cómo había quedado el lugar.

Pero las noticias que ella había recibido no las había esperado, ya que el equipo le informo que en el castillo parecía ser que se había librado una batalla en la cual los perros negros habían sido brutalmente asesinados en batalla, los detalles eran que la mayoría de los cuerpos habían sido partidos y destrozados, y los pocos cadáveres mostraban indicios de haber tenido una muerte rápida por varias flechas que tenían clavadas, también ella había sido informada sobre la muerte de la mano derecha de Olga, pero no había rastro alguno de su enemiga, por lo que esto fue información clasificada que no debía saber nadie.

Después de un tiempo, Celestine había recibido otra noticia por parte de una de sus aliadas, en dónde decía que uno de sus equipos de reconocimiento también había encontrado la misma escena en un pequeño pueblo entre los bosques, serca del castillo de Olga.

Después de eso, los días habían pasado con tranquilidad para la reina elfa blanca, pero ella estaba sumida en sus pensamientos con las noticias que ella había escuchado, saber que algo o alguien estaba ahí afuera y se había encargado de aniquilar a dos grandes grupos de los perros negros era algo que la tenía inquieta, el misterio era algo que podía carcomer a alguien debido a la curiosidad.

"¿Se encuentra bien mi reina, necesita que le traigan algo?" Dijo Claudia Levantina, su guardaespaldas personal que también forma parte de las princesas caballero.

"No, descuida Claudia, estoy bien... es solo que algo me a estado molestando desde que había escuchado las noticias".

"Bueno, las demás princesas ya están al tanto de varios rumores que han estado circulando por los últimos días, todos hablan de un guerrero humano que porta una espada gigante en su espalda, con la cual es capas de matar a tres hombres a la vez, todos lo llaman El Espadachín Negro, ¿Usted cree que esta persona fue la que acabo con los hombres de Vault en el castillo de la reina Olga?" Fue la pregunta de Claudia que había dejado pensante a Celestine.

"...Tal vez, no sabemos con exactitud quien es esta persona, solo esperemos que no se trate de otro enemigo" dijo Celestine mientras veía la gran vista que ella tenía de las tierras que estaban en su dominio, pero ella podía sentir que había un cambio en el ambiente, y esto no era algo que venía por parte de los perros negros, esto era otra cosa, algo que la llegaba a incomodar.

"Claudia... ¿Sientes el frío?" Pregunto Celestine confundiendo a su guardaespaldas.

"Ah... no mi señora, aquí no hace frío, aunque si es cierto que el ambiente es algo fresco por las nubes que cubren el sol".

"No, no me refiero a eso... siento que algo a cambiado, que hay algo oscuro y siniestro por ahí afuera... algo que no hemos visto antes, puedo sentir su negatividad, su frialdad... ¿De que se trata todo esto?" Dijo Celestine mientras trataba de cubrirse con sus brazos al sentir un escalofrío recorrer su cuerpo, luego ella tuvo varias visiones.