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Estuve tres días detenido por la escena que hice con el hombre que había lastimado a mi padre, hasta que mi papá pagó una cuota y pude salir.

-vámonos- dijo mi padre tendiéndome las muletas que se habían llevado, y tomándome de los hombros caminamos hacia el auto y llegamos a casa. En el camino no se dijo ni una sola palabra, notaba a mi padre algo diferente, y claro nadie lo estaría después de haber visto esas asquerosas escenas de mi. Al entrar vi a Sasuke con un pastel de bienvenido, pero las ganas que tenia de festejar o dar la cara para hablar sobre lo sucedido eran nulas así que pasando de largo a los dos camine hacia mí cuarto, pero al llegar a las escaleras una de mis muletillas se atoro y cai; dejándome llevar por la lagrimas.

De pronto sentí como dos pares de brazos me abrazaban con fuerza y acariciaban mi cabello - lo sien/

-basta Naruto deja de culparte, cuando verás que eres una víctima- mire a Sasuke -que no viste lo que hice, iré a la cárcel !- Minato tomó el rostro de su hijo y lo encaró -hijo mírame! No permitiré que te suceda algo más confía en mi- Naruto limpio las lágrimas en su rostro y alejo a Sasuke y Minato con sus manos -necesito estar solo- los vi asentir y retirarse en silencio de la casa.

Comencé a pensar en todo buscando una solución, ¿que es lo que haría ahora?, su vida iría por otro camino ahora y estaba seguro que el básquet no sería una opción con sus piernas así. Entonces que le quedaba, había dedicado su vida al deporte y no había pensado en otras alternativas. Sabia que tarde o temprano tenia que retomar la escuela, había sido una humillante obra de compasión que la directora le diera la oportunidad de incorporarse presentando un par de exámenes para estar al corriente, pero ¿después que?, ahora era un lisiado ¿que tanto podía hacer?.

Respire hondo y limpie las lágrimas en mis mejillas -Vive Naruto vive- quería vivir quería seguir con su padre y sus amigos, quería volver a tener su vida como antes, seguir siendo el capitán de baloncesto, seguir siendo aquel chico popular de la escuela, quería patinar con sus amigos he ir de fiesta, pero una voz en su mente le decía lo contrario "no tienes esperanza muere", "nadie te querrá ahora, no sirves para nada más que el básquet y ahora ni eso puedes" , "quítale esa carga a tu padre de lidiar con un lisiado enfermo como tu" , " acaso no recuerdas lo que le dijiste a tu propio padre", "tu cuerpo es asqueroso cuantos hombres lo han tocado, todo de ti esta sucio, tu boca, tu cuerpo, tus manos... manos manchadas en sangre, irás al infierno". -CÁLLATE!- grite a todo pulmón, ¿que me sucedía?, ¿ahora escuchaba voces?.

Me levante con dificultad con mis muletillas y caminé hacia la entrada de la casa hasta abrir la puerta y ver a mi padre y a Sasuke sentados en las escaleras -papá... necesito ver a mamá- mi padre me miro comprensivo y asintió.

Llegamos al cementerio y camine lentamente hacia la tumba de mamá - hola mamá,cuánto tiempo, tuve unos contratiempos y no pude venir a verte, lo siento mucho....- me quede en silencio un rato viendo su nombre en la piedra - madre se que es una molestia pero te necesito, necesito tu ayuda para seguir adelante, no se que hacer mamá no se por que sigo vivo siquiera, y tengo mucho miedo de lo que soy capas y de la voz en mi cabeza, tengo miedo de lo que estoy dispuesto ha hacer si esos hombres disminuyen su condena, y se que no debería sentirme así sabiendo que probablemente al morir no nos veamos en el paraíso, pero te amo tanto y te extraño un montón, le pido a Dios que se iré al infierno pueda concederme el verte una vez más mamá- acaricie su nombre y saque con mi otra mano una foto de mi bolsillo donde ella y yo sonreíamos y la puse debajo de una piedra -nos vemos mamá, me encantó hablar contigo- me levante y camine hacia la salida con mi padre y Sasuke -vámonos-.
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Toda la semana me dediqué a estudiar con ayuda de Sasuke para los exámenes que presentaría.

-no idiota! Lo hiciste mal de nuevo te dije que se tiene que sustituir X no Y- rasqué mi cabeza confundió - oye tu eres el idiota que no me explica bien!- , -no dejaré que me culpes por ser un cabeza hueca- tome su playera con fuerza acercándolo a mi furioso -¿que dijiste bastardo?, dilo de nuevo- me tomo del cabello intentando apartarme pero terminamos cayendo al suelo hacia atrás con Sasuke arriba de mi; de pronto el contacto visual era lo único extraordinario en esa habitación -Naruto- dijo Sasuke casi en un susurro  -Sasuke - acercó con lentitud sus labios a los míos hasta rosarlos pero sin besarse, lo vi dudoso para continuar así que tome su nuca y junte nuestros labios.

Nos separábamos por falta de aire y después volvíamos a besarnos enredando nuestras lenguas. De pronto sentí la mano de Sasuke entrar por mi playera y el contacto de su mano con mi piel.

Golpe su rostro y me arrastre lejos de él muerto de miedo -no quiero duele- dije temblando. ¿Que me pasaba? mi mente era un caos y mi cuerpo había reaccionado solo, quería controlarme pero no podía evitarlo, -Sasuke lo siento yo... no se que me pasa, actúe sin pensar- , -shhh Naruto todo estará bien tranquilo fue mi culpa, fui demasiado rápido lo siento- me tranquilice al sentir la mano de Sasuke en la mía y respire hondo. -¿crees que necesito un psicólogo?- lo mire asustado -Naru solo cuando estés listo, no te mortifiques más ¿si?, mañana entrarás a la escuela de nuevo, yo pasaré por ti y es en lo único de lo que te debes preocupar ahora ¿si?- lo miraba tratando de comprender sus palabras -okey- sonreí y apreté con fuerza su mano -Gracias por estar siempre conmigo Sasuke-.

SASUKE

Mire su sonrisa y sentí el apretón de mano y me acerqué a besar su frente -tengo que irme Naru - pude verlo agachar la cabeza triste y acaricie sus mejillas -¿que sucede? Usumaki Naruto no es un amargado o ¿si?- me miro con una sonrisa burlona y golpeó amistosamente mi pecho -claro que no Sasuke idiota, ese eres tu- lo abrace y de nuevo me despedí.

Al salir y entrar al auto me deje caer en el asiento y suspire -ha... Dios ¿por que a él?- las imágenes de los videos que vi de Naruto en el estrado no salían de mi mente y el hecho de ver a una personas como Naruto alguien alegre, fuerte, extrovertido, hermoso, popular y bondadoso, siendo ultrajado y maltratado de un modo tan violento.

Le provocaba arcadas. Sabia con certeza que aquellos hombres ni siquiera doblaban la edad de Naruto y juntos habían secuestrado y abusado de un adolescente por meses. Admiraba la fuerza de Naruto y admiraba como se enfrentaba de frente a su situación y si caía estaría junto a su padre para levantarlo, pero hasta ahora Naruto lo estaba haciendo bien. - eres increíble Naruto-.

Entre Paredes Rojas Donde viven las historias. Descúbrelo ahora