XIX: Cambios

188 16 3
                                    

Al parecer yo había caído inconsciente, probablemente alguien me noqueo, sin importar que fue o quien ya me encontraba por segunda vez en el día encadenada, ya deducia quien había sido el encargado

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Al parecer yo había caído inconsciente, probablemente alguien me noqueo, sin importar que fue o quien ya me encontraba por segunda vez en el día encadenada, ya deducia quien había sido el encargado.

—Al parecer ya te levantaste, tenemos mucho que charlar, Sachiko —trate de levantar la mirada para encontrar de donde provenía la voz.

—Otra vez tú, no te cansas de encadenarme ¿Cierto? Incluso creo que mis muñecas ya se están acostumbrando —mire hacia los ojos de la vieja esta, manteniéndose seria.

—Ya que veo que no harás nada —aclaro para luego sacar las cadenas de mis manos; puedo hablarte sobre un tema que me ha interesado. Veo que el amor que le has brindado a Garou ha estado retrasando su transformación a monstruo

«¿Que carajo está tratando de decirme? ¿Quiere llegar a donde? A que le patee el trasero quizá»

—Continuo hablando—Pero, ambos, cuando se les lastima el otro logra mostrar un potencial brutal. Así que me preguntaba que pasaría si... te matará, es decir. Quizá logre crear al monstruo perfecto —acercó una daga a mi rostro logrando cortar parte de una de mis mejillas.

—me limito a quejarme y logro alejar mi rostro del dolor rápidamente—Estas usando esta mierda para matarme solo porque ya no te sirvo. Llevo muchos años trabajando contigo Psykos, no creas que no sé como juegas.

—Tienes razón —aseguro poniendo sus manos al rededor de mi cuello, su fuerza me sofocaba logrando asfixiarme, sentía como la sangre se me subía a la cabeza, creía que mi vida acabaría aquí y ahora.

Pero no podía hacerlo, yo no era así y no iba a dejarme vencer tan rápidamente. Pensaba que ya me estaba poniendo azul, agarre la daga que había dejado caer hundiendola en el antebrazo de la estúpida.
Automáticamente esta me soltó para quejarse del dolor, me caí de rodillas tratando de respirar a la vez que tosía y me sostenía el cuello, como si aun lo sintiera apretado.

—¿Que te pareció mi regalo? No eres la única a la que le gusta clavar cosas sobre la gente que le estorba —Aprisa me puse de pie, y en menos de lo que canta un gallo Psykos ya había agarrado el arma nuevamente para ponerla en mi pecho, trate de esquivarlo pero aún así logro cortar parte de mi hombro.

Ya no le servía, así que solo la arrojo, ahora solo usaría sus poderes mentales, yo ni siquiera tenía mi katana como para defenderme.
—Eres realmente un estorbo, mañana será el día en que extermine a la Asociación de héroes y tu realmente me estas haciendo poner seria —su enfado era tanto que por primera vez había sido testigo de su gran fuerza psíquica.

𝐄𝐋 𝐋𝐎𝐁𝐎 𝐘 𝐋𝐀 𝐎𝐕𝐄𝐉𝐀 ── 𝐆𝐚𝐫𝐨𝐮 [TERMIMADA]Where stories live. Discover now