✎｡｡｡EL LEOPARDO BLANCO *ೃ࿔ [wakasa × shinichiro]

𝐭𝐫𝐲 𝐭𝐨 𝐥𝐢𝐯𝐞 𝐰𝐢𝐭𝐡 𝐭𝐡𝐞 𝐩𝐚𝐢𝐧.

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Un peliblanco con mechones negros, ojos Violeta mirada neutra y su expresión seria y desinteresada se encuentraba tranquilo caminando sin rumbo en las orillas de la playa descalzo y con solo un pantalón suelto.

Imushi no sabía en qué momento se encontraba tan perdido, aunque seguía viviendo era muy doloroso para él, aquel vacío que un día se llenó volvió a lo de antes, ni siquiera sabe que día era o que hora o como habia llegado ahí, solo caminaba tranquilamente disfrutando su paleta de cereza.

Aprendió a vivir con el dolor.

El viendo recorría todo su cuerpo sintió una pizca de escalofríos por toda la espalda, ¿cuántos años habían pasado?, 2 o 3 años, aunque esto sonará muy cruel se tuvo que alejar de mikey y emma no sabía nada de ellos o que habían hecho de su vida se sentía estupido por a verlos abandonado y no digamos de izana no pudo encontrarlo así que en el momento menos esperado dejó de buscarlo.

Paro de caminar y se sentó viendo como el sol se iba para ocultarse y desaparecer de su vista, se dio cuenta que su paleta se terminó así que lo sacó de la boca y miro el palito que quedaba.

-Adios- susurro mientras guardaba el palito en su bolsillo y se despedía del sol, cuando escuchó unas pequeñas risas volteo su mirada y observó a una familia muy feliz, el padre abrazando a su probable esposa mientras sus tres niños corrían y jugaban con la arena quejándose de que querían quedarse por más tiempo mientras los padres de ellos les regañaban y decían que no porque ya era de noche, wakasa sintió un pesar en su pecho.

"Pudimos a ver estado en una situación así shin" pensó imushi para luego suspirar y levantarse limpiándose la arena restante y empezando a caminar de nuevo para irse de la playa.

-Oye disculpe- una voz aguda lo hizo parar para darse la vuelta y ver quien lo llamaba.

-¿Qué?- pregunto wakasa mientras observaba sin interés a aquel niño que era pequeño parecía que tenía como unos 7 años.

-¿quieres jugar?- pregunto el niño con una sonrisa.

-Ey izuki te dije que no molestes a los demás, vamonos- la señora hizo una reverencia y agarro la mano de su hijo para llevárselo pero el niño negó.

-Se ve muy solo aparte tiene esa mirada triste, mamá dijiste que debemos ayudar a los demás así que déjame jugar con el- wakasa no decía nada solo observaba detenidamente.

-Hijo no digas eso- la señora iba a seguir pero vio como su otro hijo corría para meterse al mar así que tuvo que ir detrás de el ya que su esposo estaba ocupado.

-Señ...- wakasa lo miro serio y el niño se estremeció mirando a otro lado tímidamente.

-Oi niño no te metas en la vida de los demás, la gente no es buena como crees, podría ser un asesino.- dijo imushi asustando al infante.