Capítulo 6

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-¿Otro semáforo en rojo? ¿De verdad? -Protesto molesta negando con la cabeza.

-Si te sirve de consuelo, yo estoy llegando tarde a una entrevista de trabajo.

-Si quieres me bajo aquí, no me gustaría que llegases tarde por mi culpa.

-Tranquila -sonríe dándome seguridad -, conozco al dueño más o menos, voy a conseguir el trabajo igual.

-Así que eres un enchufado -arqueo una ceja mirándole.

-No. Más bien lo hago por hacerle un favor a mi familia.

El sonido de un claxon nos avisa de que el semáforo se ha puesto en verde. Cuando nos estamos aproximando cerca de la tienda donde trabajo le voy indicando porqué calles tiene que ir hasta que finalmente llego a mi destino.

-Muchas gracias por traerme. ¡Hasta luego!

-No las des.

Me bajo rápidamente de su coche y me dirijo rápidamente hacia la entrada. Nada más entrar en la tienda me dirijo directamente al vestuario de personal para ponerme la camiseta reglamentaria.

-Llegas una hora y media tarde Ashley. ¿A qué se debe este retraso? -La jefa de personal me mira con cara de pocos amigos.

-El autobús que tenía que coger estaba en mantenimiento y han tardado en repararlo. Lo siento, no volverá a pasar -digo acomodándome el pelo lo mejor que puedo.

-Podrías haber cogido un taxi perfectamente. En fin, ya estás aquí pero la próxima vez no habrá segunda oportunidad, te irás a la calle.

-De acuerdo.

-Haz el favor de ponerte a trabajar, acaba de llegar la nueva colección de ropa interior femenina. Hay que revisar que esté todo en perfecto estado, empaquetarla y guardarla. A las dos haces el cambio con Natalie, tú te encargas de la caja.

Me pongo manos a la obra enseguida en el almacén con todas las cajas que han llegado de la nueva colección. Al observar los distintos conjuntos de encaje de tangas y de sujetadores me entra la tentación de llevarme algunos a mi casa pero me contengo y sigo guardando la lencería dejándola en perfecto estado.

-Aquí tiene, que pase una buena tarde -sonrío de la forma más amable posible a la clienta que tengo delante dándole la bolsa con lo que acaba de comprar.

-Gracias e igualmente -la joven me muestra su sonrisa más amable, así da gusto tratar con la gente y no con algunas personas, que ni te responden el saludo al despedirlas.

-¿Vienes a comer? Ya es hora -Me informa Natalie poniéndose a mi lado con su pequeño bolso colgando de su hombro.

-¿Ya? -Natalie asiente -Tenemos solo media hora.

Asiento, cojo mi bolso y nos vamos a un bar que está a una calle de aquí. Es donde siempre voy con Natalie a comer cuando llega nuestra media hora de descanso.

-Por cierto, ¿te has enterado? -Dice Natalie dándole un mordisco a su hamburguesa, yo niego con la cabeza mientras espero a que me informe - Mañana tenemos reunión de personal con el jefe, al parecer quiere renovar plantilla y se rumorea que va a cambiar a la jefa de personal. Ojalá por favor, no soporto más a Veronica.

-No tenía ni idea de nada.

-Nos lo ha dicho ella misma nada más empezar el trabajo esta mañana pero claro, no estabas. ¿Qué te ha pasado?

-No me ha sonado la alarma -digo dándole un trago a la bebida y le doy un mordisco al bocadillo que me he pedido -, me he levantado tarde, cuando he llegado a la parada del bus se estaba yendo... En fin, un desastre, por suerte ha aparecido un vecino que vive en el mismo piso que yo y me ha traído hasta aquí.

Love AgainWhere stories live. Discover now