Lo Que Nunca Pasó (Sin Editar)

Capítulo 11 - La fiesta III

Maratón 3

Pov Kilian

Pasa por delante mía y se escabulle entre la gente que baila sobre la pista, la sigo con la mirada hasta que desaparece de mi campo de visión.

Apoyo mi espalda en la pared recobrando el aliento y me paso una mano por el pelo desordenando algunos mechones.

Ha sido jodidamente ardiente.

Ese vestido, ese puto vestido me ha hecho imaginarme cosas que no debería pensar.
Meto la mano dentro del bolsillo de mi pantalón para sacar una cajetilla de tabaco.

Me pongo uno entre los labios y lo enciendo dándole una profunda calada antes de expulsar todo el humo contenido.
Echo la cabeza hacia atrás intentando bajarme el calentón pero el dolor en mi entrepierna no me ayuda.

Respiro hondo cerrando los ojos unos segundos intentando pensar en otra cosa.
Pero el recuerdo de su cuerpo voluptuoso de sus labios carnosos y rosados, como sus curvas se amoldaban a la fina tela del vestido y ya ni hablar de su culo.

- Me cago en la...- gruño al notar como se ha levantado más si eso es posible.

- Eso ha sido, wow.
No hace falta que gire el rostro hacia el lado de donde proviene la voz ya que la reconozco a la primera.

-¿Que quieres Hunter?- le digo antes de darle la última calada al cigarrillo y aplastarlo con el pie.

Me acomodo un poco los pantalones y salgo del pasillo con él a mi espalda.

- Yo sabía que tarde o temprano pasaría- comenta una vez se pone a mi lado.

Lo miro de reojo teniendo que bajar un poco la cabeza para mirarlo.

- ¿Te la quieres follar verdad?

- Estás mejor callado, ¿nunca te lo han dicho?
Me acerco a la barra y pido una copa de whiskey que no tardan en traer. Le pego un trago bebiendome todo el contenido de una.

-¿Frustado porque no ocurriera?
Suelta una risotada al ver la cara exasperada que le pongo- yo te entiendo, con semejante mujer es normal.

Me pido otra copa en lo que apoyo los brazos sobre la barra.

- ¿No era que a ti no te iban las tías?
- Y no me van, pero tengo ojos y sé apreciar la belleza.

Me giro sobre mi eje apoyando la espalda en la barra barriendo la mirada por la pista
de baile.

- En el segundo piso- escucho la voz de Hunter señalándome el piso superior.

Dirijo mi mirada a la zona hasta dar con una cabellera morena que tanto reconozco.
Tuerzo el gesto por los pensamientos que cruzan por mí mente, tomo el chupito que acaban de dejar a mi lado de una volviendo a dejarlo en la barra ya vacío.

- Me voy-le digo a Hunter antes de alejarme hacia unas chicas que llevaban rato sin quitarme la mirada de encima.

- Eres gilipollas, ¿lo sabías?- grita Hunter en lo que me alejo.

- ¡No me has dicho nada nuevo!- digo de vuelta despidiéndome de él.

***

Dalia

Llego a casa a eso de las 4 de la mañana, entro cerrando la puerta delicadamente intentando hacer el menor ruido posible, me descalzo cogiendo los tacones entre mis manos, una vez siento la comodidad de mis pies con el frío suelo suelto un suspiro, aliviada.

Subo las escaleras hasta llegar al segundo piso, entro un momento al baño para hacer mis necesidades y desmaquillarme lo mejor posible para mañana no tener la cara como un mapache.

Cuando ya estoy medianamente bien, cierro la puerta detrás de mi abriendo la mía, entrando en mi habitación.

Dejo los tacones en el suelo, bajo la cremallera del vestido junto a las tiras de la espalda bajandolo por mi piernas hasta caer todo arrugado en el suelo.

Abro el cajón y me pongo lo primero que pillo antes de tirarme encima de la cama. Estiro el brazo hasta dar con el interruptor y apagar la luz.

Ha sido una noche... interesante.

**

Fin del maratón
Que os ha parecido?? ;)