Entre demonios

Capitulo X

"Los celos son posesión, no importa cuánto quieran pintarlos. Es asfixiar al otro en nombre de un amor enfermizo".
Walter Riso.

Capítulo X

—Michelle ya basta—ordeno entre risas.

—Esta bien pero dime ¿los rumores son ciertos?

Michelle es mi mejor amigo desde mis 12 años, al ser mi vecino me relacione mucho con él a tal punto de entablar una amistad muy fuerte y confiable.

Fijo la mirada en mi celular y sonrio. —Si, todo lo que dicen es cierto.

Se tira en la cama y suspira. —Se nota que Bile es bien ardiente.

Si, ya le había contado todo lo que había sucedido el día de ayer, anoche le escribí que viniera a mi casa para irnos a la universidad juntos y que tenía que contarle algo muy importante.

—Ya te dije que si, así que vamos no quiero llegar tarde.

—Esta bien.

Llegamos a la universidad y estaciono mi auto, apenas lo apago, Michelle abre la puerta y se baja rápidamente para caminar directo a su bloque, me bajo igual de rápido para gritarle:

—Te dije que íbamos a llegar tarde.

No se digna en responder por la prisa que lleva para no llegar más tarde y que lo dejen entrar. Llego a mi aula y por suerte todavía no ha llegado el docente, así que me acomodó en una silla y empiezo a revisar mi celular.

—Hola Kale—saluda Rez al llegar a mi lado.

No había notado que también faltaba ella, aunque es costumbre ver que siempre llega bien tarde.

—No se porque en tus veinte años de edad no haz aprendido a ser responsable—le reprendo mientras sonrio.

Se encoge de hombros.—Sabes que no es lo mío levantarme tan temprano.

—Lo sé, pero debes llegar más temprano si no quieres reprobar esta asignatura, hoy te salvas porque el profesor no ha llegado.

—Esta bien pero ya para, pareces mi mamá.

No respondo nada y solo me limito a sacar algunos apuntes para estudiar antes que entre el docente ya que tengo un examen, miro de reojo y veo que Rez esta concentrada revisando su celular.

Pasados unos minutos entra el docente y empieza a explicar la clase para después proceder a realizar el examen, desde ayer que llegue de la casa de los Rein me he estado preparando porque no lo quiero perder.

—Señorita Kale por favor entregue el examen, ya se acabo el tiempo—ordena el profesor.

Soy la última en quedar en el aula, ya todos han entregado su examen y salido, admito que me tome mi tiempo para responder, no quiero que una nota baje mis calificaciones.

Entrego la hoja del examen al profesor y salgo al pasillo en donde mi amiga me está esperando.

—¿Por qué demoraste tanto? —cuestina cuando estoy a su lado.