Escena de película

1.4K 143 18
                                    

Pov: Andi

-Você está louca- me respondió cuando se risa cesó ¿Enserió tan mala era mi propuesta?
En mi cabeza sonaba bien.

-No, no estoy loca ¿Aceptas o no?- ella me miró a los ojos, creo que esta tratando de ver si esto era una broma; pues no lo es querida.

-Andrea- no dejé que terminará -¿Ya no soy "Andi"?- ella sacudió la cabeza -Escucha, recién te conozco, sería muy inmaduro de mi parte aceptar tal propuesta y aunque quisiera tengo cosas que hacer, lo siento- "Aunque quisiera" ¿O sea que si quería?

-"Aunque quisieras" o sea que si quieres, ¿Cuál es el problema? Vamos, prometo que será un buen fin de semana- ella negó con la cabeza -No he dicho que quiero y ya dije que no Andi, me tengo que ir, me están esperando en casa, adiós- ¿Quien demonios la espera en casa? Ella se levantó de la mesa, pero antes de que se fuera yo igual lo hice y la retuve.

-¿Tienes novio? ¿Eso es lo que pasa?- ella me miró con cara de confusión -Primero, no, no tengo novio, segundo, si tuviera pareja ¿Porqué asumes que sería un hombre? Tercero, si lo tuviera no sería tu problema, cuarto y último no sabia que esa propuesta era una cita- lo último lo dijo con una de sus cejas arriba, mierda, creo que la he cagado.

-Yo, lo siento, es que uh, nadie nunca se hubiera negado a la propuesta- asintió -Ve aprendiendo que yo no soy nadie- me dio una pequeña sonrisa sarcástica y se fue.

Se fue, demonios. Se fue a su casa con no se quien y sin aceptar viajar conmigo. Me hirió, aquello hirió aún más mi orgullo. Era la segunda vez en el día en que me decían que no, cuando ni siquiera en una semana me dicen "No".
Okay, Andrea relájate, tome mi celular que estaba en la mese y me fui de aquel local que solo me recuerda a la hermosa chica brasileña. Aquella hermosa chica que me había rechazado.

Al salir observe a todos lados buscando a mi chófer, lo encontré unos pasos más adelante, iba a ir directo allí, pero, vi a Emilia en la parada de buses, inmediatamente mi instinto me dijo "No dejes que se vaya en un bus" pero mi ego herido me dijo "Ella te rechazó, un viaje, en un hotel de lujo, a ti: te rechazó"

Lamentablemente mi ego por segunda vez perdio. Fui hasta donde ella estaba haciéndole una señal a Luca, mi chófer de que me esperara.

-Puedo llevarte si quieres- ella me miró -Ah, tú de nuevo. No gracias puedo irme sola- negué -No quiero que te vayas en bus- ella río sarcásticamente -No soy de tu propiedad ni uno de tus hoteles, no puedes venir y decidir si me puedo o no ir en un estúpido bus- me ofendí ¿Enserió sentía que la estaba mandando? -Oye cálmate, solo te estoy diciendo que puedo llevarte ¿Cual es tu problema?- ella miró a todos lados, imagino que no quería hacer un escándalo en público -Mi maldito problema es que tú me estas tratando como si fuera una prostituta o una de esas niñas que quieren estar con ricos y viejos solo por dinero y créeme Andrea no soy ninguna de ellas-

Wow, ¿Soy vieja? Solo tengo 30 años, ¿Cuando la trate como una prostituta?
No entendía porque se sentía así, pero mi corazón se agito al pensar que alguien la pudiera tratar así, o peor que se haya sentido así por mi culpa. Inexplicablemente tenía un instinto protector hacia ella. Quise arreglar eso.

Iba a hablar pero no me di de cuenta de que el bus ya había llegado y ella iba directo a el. Inmediatamente fui a donde ella y la tomé del brazo.

-Ojitos, espera, hablemos, no te vayas, discúlpame- fue lo primero que salió de mi al estar a su lado -Wey, ya basta, tengo que irme, déjame en paz- me miró mal, vaya ella tiene carácter.

Se soltó de mi agarre y amago a irse de nuevo, no me dio más opción que cargarla y llevarla hacia mi auto, ella no hacía más que gritar. Estábamos haciendo toda una escena de películas, pero fue la única forma que encontré para que ella no se fuera de mi, aún.

Era de noche, no la iba a dejar para que se fuera sola, la llevaría a su casa, pero antes le dejaría claro que no la veo como una mujer fácil o aprovechada.

Pérdida en tu mirada (Andi y Emilia De rebelde netflix) (Endi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora