"El rey de la mafia" C.V y M.N

Capitulo Nº7 "Canadá"

Narrador Omnisciente

Los Ángeles, California.

La noche fría para Christopher empezó desde que tuvo una pequeña platica con Vanessa Cruz, sus pensamientos se entornaron en pensar si todo lo que le dijo ella era verdad o solo quiso ver su cara de idiota.

Dos noches de ese encuentro con Vanessa Cruz y Christopher no ha podido dormir bien, en esas dos noches se trasnocha solo al pensar que su esposa este viva y en Canadá sola y sin protección.

Clarisa, aunque lo nota extraño no quiere meterse ya que su genio está a favor de él y ella no quiere irse de la vida de lujos que le da Christopher.

4:16 de la madrugada y tercera noche que Christopher se levanta como un sonámbulo y camina hacia su oficina por un trago y se sienta en su sillón hacer lo que estas tres noches hacía, beberse un whisky y pensar en su amada esposa muerta.

La puerta se abre y mira a su amigo Zabdiel en pijama y descalzo entrando a su oficina. Christopher no dice nada y su amigo solamente se sienta en el sillón y queda en silencio, sabe que a él le pasa algo y Zabdiel quiere saberlo.

No pasa tanto tiempo y Zabdiel es el que habla primero.

Zabdiel: ¿Qué te sucede? –Christopher levanta la mirada y no puede aguantar más y lloriquea. –maldita sea que tienes.

Christopher: Es...es...es Maribel. –susurra y Zabdiel se queda quito al escuchar su nombre. –creo que hice mal en dejarla ahí. –Zabdiel se levanta y camina hacia el para quitarle el vaso de licor de su mano para ponerlo en el escritorio.

Zabdiel: No fue culpa tuya, la otra vez lo dije por coraje lo lamento.

Christopher: Vanessa Cruz tiene información de Maribel, me quedé tan perdido al escuchar esa frase de su boca que lo único que hice fue salirme de ahí y correr a casa y encerrarme como un cobarde.

Zabdiel: Ahora entiendo por qué ese día no mencionaste nada en todo el camino.

Christopher: ¿Y si ella está viva? –pregunto a su amigo Zabdiel y él lo único que hizo fue quedarse callado. –y si ella me llamo y no la atendí, porque tengo muchas llamadas que no eh tomado por mi desinterés.

Zabdiel: Págale lo que Vanessa dice... y salgamos de dudas.

Christopher: Prepara el auto.

Zabdiel: ¿Estás seguro? Vanessa no te mandara al diablo a esta hora

Christopher: No me interesa está en juego numeroso dinero.

Zabdiel: Iré a preparar, no demores.

Christopher toma solamente una chaqueta para el frio y sale de casa junto a Zabdiel rumbo a la casa de Vanessa Cruz, los recibimientos fueron con armas y un alboroto por Christopher 4:56 de la mañana era la hora exacta que Vanessa Cruz se levantó de una apreciada cama para atender a un Christopher Vélez impaciente por su espera.

Vanessa camina por el pasillo y bosteza y se acomoda su bata fucsia que cubre su esbelto cuerpo, Christopher camina de un lado a otro y Zabdiel es el único que está quieto en el asiento, la puerta se abre y miran a Vanessa Cruz entrar con una cara de pocos amigos.

Vanessa: Se breve, no estoy de modo para hablar contigo. –Vanessa toma asiento en su sillón de cuero y Christopher camina hacia el escritorio y coloca sus manos en él.

Christopher: Un millón. –fue lo único que dijo para que Vanessa lo mirar fijamente. –Un millón por la información. –Vanessa sonríe picara y lo único que hace ella es mover la cabeza en forma de negación.