Harry Lestrange

Capítulo 8

Se actualizó el 18/01/2022 a las 19:05 Hora Paraguaya

En el momento que Bellatrix Lestrange expuso su presencia en el Ministerio de Magia, todas las personas desearon ir a hablar con ahora mismo la mujer política más poderosa de Gran Bretaña Mágica y el mundo mágico en general. Los periodistas al verla comenzaron a comportarse como polillas, que eran atraídos por una fuente de luz, cada uno de esas personas deseaban escuchar algo, una sencilla palabra de la bruja que no estaba con la paciencia para soportar a idiotas en busca de fama. Y en estos momentos era algo que Bellatrix no iba a soportar en lo absoluto, dado que tenía que golpear a muchas personas el día de hoy, ellos tenían que agradecerle al imbécil de Lucius Malfoy, que el día de hoy ella iba a dialogar. Ya que el día de ayer, estuvo de cacería, el solo recordar como persiguió a Lucius por un prado con un rifle, uno de los artefactos muggle que más le gustaba, sin duda fue emocionante, y no entendía por qué no se aprobó la ley de casería de muggles, era divertido.

Pero ahora tenía que venir hasta estos idiotas, porque a Lucius Malfoy se le ocurrió la brillante idea de mover sus contactos y avalar, sin ninguna pizca de pruebas, de que Harry, su amado y precioso hijo, le robo a Draco Malfoy lo que le pertenecía. Lucius siempre deseo el cargo de Lord Black, pero incluso con todos los sobornos que dio en el transcurso de los años, nunca se pudo hacer con dicho puesto. Aunque ya preparo una contramedida para destruir a Lucius, ya lo mando a San Mungo donde lastimosamente tenía que quedarse durante un largo periodo de tiempo. 6 Meses para ser exactos, lo que le daba tiempo a Bellatrix y Andrómeda de hacer todos los papeleos para que el mando de la familia Malfoy, pase a Narcissa tras incumplimientos de los contratos matrimoniales que firmó el padre de Lucius, en su momento.

El Wizengamot, también conocido como la junta de la ley mágica, es el más alto tribunal mágico de gran Bretaña. Albus Dumbledore ocupa el puesto de jefe supremo del este circo según palabras de Bellatrix, en el lugar se reunían las personas con más poder en toda gran Bretaña, las familias ancestrales, las nobles o cualquier persona con un gran poder monetario, como por ejemplo el ministro de Magia Cornelius Fudge, el hombre era un inepto, pero gano mucho dinero al ser la perra de la facción oscura como se denominaba a la facción de familias que apoyaron a Voldemort y a la supremacía de la sangre sin importar nada. Dolores Umbridge, la perra del ministro de magia, incluso aunque ella sea la subsecretaría o la amante, o lo que sea de Cornelius no podía estar en este lugar. Pero ella consiguió poder monetario y político.

Lady Lestrange, Lady Malfoy... Qué agradable sorpresa encontrarlas – Esa voz tan insoportable, que al escucharla tu cuerpo parecía sufrir, romperte los huesos, sufrir algún mal estar estomacal no era nada contra el escuchar esa horrible y exasperante – Permítame acompañarla.

Umbridge ni siquiera saludo a Andrómeda que estaba con sus hermanas, pero esta vez Bellatrix no dijo nada, por supuesto era algo que a Andrómeda no le importaba en lo absoluto. Si se hablaba de poder fijo, Andrómeda poseía a montones, era hermana de Bellatrix y tía de Harry. Como también abogada y socia principal de cualquier negocio que a Bellatrix le interese abrir, sin duda alguna algo muy lucrativo, ya que su hermana dejaba que ella haga todas las cosas legales. Andrómeda no necesitaba esforzarse mucho si lo deseaba, su hermana le pagaba muy bien, y se tenía que agregar que ella podía utilizar cualquier cosa sin restricciones. Un plus al ser la abogada de Bellatrix.

Veo que su hijo no vino con usted – Al escuchar eso Bellatrix se detuvo al instante, el tono con el que dijo esas palabras, no fueron del agrado de la pelinegra que se quedó mirando a la mujer que no tenía ningún sentido de la moda – Pasa algo Lady Lestrange.

La mirada intensa de Bellatrix no duro mucho, ya que sus hermanas le dieron pequeños empujones para que ella siguiera su camino, esta vez Dolores Umbridge se salvó de Bellatrix Lestrange. Pero no iba a olvidar esto, ella iba a castigar a la mujer de una forma que nadie iba a esperar, por el momento ella iba a gozar sé esa estúpida sonrisa.