Capítulo 9

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Me costó bastante trabajo despertar después de la noche que tuve con Charlie, jamás pensé que nos entenderíamos así de bien. Tenía mucho tiempo que no lloraba de la risa. Prometimos salir más, antes de que regresara a Nueva York y yo me fuera de viaje con mis amigos.

¿Qué tan difícil puede ser servir un helado? pensé mientras caminaba a mi primer día en la heladería. Lo que más me entusiasmaba de este trabajo era poder platicar con gente nueva, ya que la tienda está ubicada en uno de los puntos más céntricos y generalmente por la tarde noche, se llena de turistas, vecinos y amigos, pienso que será muy agradable ver unas cuantas caras familiares por ahí.

Por supuesto qué otra razón es usar el lindo uniforme; playera blanca con rayas azul marino, manga 3⁄4, pantalón o falda con medias negras y un mandil color beige. siempre que pasaba por ahí pensaba en lo bien y cómodas que se veían las chicas.

Todo estaba perfectamente bien planeado para que combinara con la tienda que tiene un estilo muy natural -las paredes son completamente blancas, hay plantas por todas partes y toques de madera desde la vitrina, las mesas y unos adorables columpios que tenían en la terraza-.

– ¡Hola! ¿Hay alguien aquí? -Me asomé por el mostrador pero no veía a nadie

– Un segundo -Sonó la voz de una chica, se escuchaba en apuros en la puerta que dice "empleados solamente"

– ¿Necesitas ayuda? -Dije

– ¿Eres la nueva? -Preguntó mientras se asomaba y parecía que estaba cargando unas cajas

– ¡Si! déjame ayudarte con eso -Dejé mi mochila en una banca de la recepción y entré a ayudarla

– Gracias, por poco hacia un gran tiradero...., Jessica - Extendió su mano para saludarme con una sonrisa de oreja a oreja

– Hailee, mucho gusto. -No pude evitar regresarle la sonrisa

Me explicó algunas cosas básicas sobre el funcionamiento de la tienda, los horarios, limpieza, formas de servir el helado y que decir al cliente para hacer una buena venta. No parecía complicado. Me dijo que ella era la supervisora, pero el que iba a darme la capacitación era nuestro gerente que aún no llegaba y como yo aún era nueva en el campo, me pusieron a repartir muestras y atraer clientes que iban pasando.

Sintiéndome algo desorientada y poco nerviosa, solo sonreía y saludaba a los que pasaban. Que grosera puede llegar a ser la gente a pesar de que tu les hables de buena manera, ¿Es tan difícil decir "no, pero gracias"? Me refiero, creo que yo también he pasado de largo aunque alguien me estuviera hablando sin siquiera voltearlo a ver, pero, ahora del otro lado, pensaba en lo horrible que era. Nota mental para mi lista: trabajar en la empatía.

En cuanto al italiano, había aprendido dos palabras ya, "Ciao" y "Vuoi assaggiare?" que significa "Hola, ¿quieres probarlo?" así que decidí probarlo con mi primera

víctima. Había un chico rubio de espaldas al local, toqué su hombro y a lo que él respondió desconcertado.

– ¡Alex!, No sabía que eras tú

– Hailee, Hola, ¿Qué haces aquí? -Tenía su celular en la mano e inmediatamente lo guardó

– Trabajo de verano... Ciao, voi assaggiare? -Dije mientras levantaba la charola de muestras y le dirigí una sonrisa

– ¡Parli italiano! ¿Qué otras sorpresas me esperan contigo? – Pregunta de forma encantadora

Quería preguntarle acerca de la noche que lo vi corriendo, pero no sabía como hacerlo o inclusive si era lo correcto. Así que hice lo que cualquier chica hace cuando quiere evitar una conversación importante.

Viaje a las estrellasWhere stories live. Discover now