🟤 1 4

2.5K 399 92
                                    

—Okay, ya medio entendí

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

—Okay, ya medio entendí. —Dije recargandome en la pared. —Izana es medio hermano de Emma, y bueno, medio hermano de nosotros también... Ah que caray. ¿Y por qué yo no lo sabía?

—Bueno, no es algo que vaya contando por ahí a lo loco. —Dijo Shinichiro.

—Entonces... —Miré a Izana y sonreí, me lancé hacia él para abrazarlo. —Bienvenido a la familia, hermanito.

Él soltó un jadeo sorprendido, y casi temblando me correspondió el abrazo.

—Aún así, tanto Kakucho como yo ya tenemos un hogar. —Dijo Izana una vez nos separamos del abrazo.

—Ah, está bien, igual ya no cabemos en la casa, ¿No me adoptan? —Sonreí y el sujeto ese Kakucho, se rió mirando hacia otro lado.

—Oye Suga, ¿No es el cumpleaños de Emma hoy? —Preguntó Shinichiro.

—Ah, si, Mikey decidió salir con ella porque estaba muy triste. —Viré los ojos.

—¿Por qué? —Cuestionó Izana.

—Porque... Uno de los amigos de Mikey, se llama Draken, la rechazó por tercera vez en la semana, y como Emma estaría sola en su cumpleaños, Mikey quiso salir con ella.

De pronto Izana se veía fastidiado, y apretaba los puños con cada mención de Mikey.

Raro.

—¿Y ahora están en alguna pandilla o algo? —Preguntó Shinichiro logrando quitarle lo irritado a Izana.

—Tenemos una pandilla, Tenjiku, pero apenas vamos iniciando. —Sonrió Izana. —Suga, ¿No te gustaría entrar con nosotros?

—Uh, no gracias.

—¿Por qué no? —Cuestionó Kakucho. —Shinichiro dijo que eres muy buena peleando, casi a la altura de tu mellizo.

—Sinceramente... se me hace una estupidez eso de las pandillas, vienen siendo delincuentes así que prefiero no meterme a ese mundo. Pero bueno, puedo darles una ayuda si lo necesitan, siempre y cuando no peleen contra la pandilla de Mikey.

—¿Y si nos enfrentamos, y ambos te pedimos ayuda?

—Rechazaré sus peticiones y no me meteré. —Me encogí de hombros.

—Entonces... Espero que puedas aceptar sernos de ayuda en algún momento.

—Claro que sí. —Asentí.

°°°

—¿El Valhalla se unió a la Toman? —Cuestioné impresionada. —Orale, esa si no me la esperaba.

—Fue difícil que Mikey aceptará, pero eso significaba que la Toman pudiera hacerse más grande y fuerte. —Me dijo Kisaki.

—Aún así me cae mal ese tal Hanma, parece un payasito todo raro.

—Te estoy escuchando.

—Pues escúchame bien escarabajo, toca a uno de mis amigos y te parto tu madre.

—Uy, agresiva como me gustan. —Rió de forma coqueta.

Pero le solté una cachetada tan fuerte que casi se cae.

—¿Así te gusto más? —Gruñí.

—Me encanta. —Dijo sonriente.

Viré los ojos pero me giré hacia Kisaki.

—¿Por qué te juntas con él? Parece que se le safó la canica.

—Ya ves, tengo que convivir con él por ser “socios” en la Toman. —Murmuró Kisaki.

—Oh, está bien.

—Oigan, lastiman mi corazoncito hablando mal de mi. —Se quejó Hanma.

—Como te decía. —Dije ignorando a Hanma, por lo que él fingió ponerse a llorar. —Kazutora también está bien idiota, con razón Hanma y él se llevaron bien.

Mi celular comenzó a sonar y yo lo saque confundida.

•••

Futuro, Sugey Sano, 27 años.

M

iré a Mikey, quién fumaba en silencio.

—¿Sabes que Chifuyu Matsuno murió? —Le pregunté.

—Ajá.

—Y Takemichi Hanagaki también iba a morir.

—Me da igual.

—Kisaki mató a Chifuyu.

—Por algo debe ser.

—Okay, okay, me estás cayendo gordo, si sigues así me iré.

—Allá está la puerta.

Abrí mi boca indignada.

Hacía muchos años que Mikey había cambiado, todo desde que Kisaki se hizo su mano derecha.

—También mató a Baji y a Emma.

—¿No eras tú la que estaba casi enamorada de ese sujeto? ¿Por qué haces tanto alboroto?

—Nunca estuve enamorada de él, sentía respeto, pero eso era antes de siquiera saber quién era realmente.

—Entonces no te quejes.

Me fastidiaba que Mikey fuera así conmigo, intenté irme de su lado porque en verdad ya no lo soportaba, pero siempre mandaba a sus hombres a encontrarme y llevarme de regreso con él.

—No me mantendrás todo el tiempo contigo, algún día me iré y no volveré jamás. —Me crucé de brazos.

—Cuando eso pase, yo estaré muerto. —Dijo apagando el cigarrillo en la ventana, luego se levantó dirigiendose hacia mi. —Por ahora, tú jamás te irás de mi lado, somos mellizos, no podemos estar lejos nunca.

—Eso no significa nada.

—Para mi sí, así que como la hermana que eres, te quedarás conmigo hasta el final, ¿Entiendes?

Apreté la mandíbula y salí de su despacho para después ir a mi habitación.

¿Qué mierda le había sucedido como para que se hiciera así de repente? Tengo que poner más atención a lo que hace Mikey.

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
On The Low [Tokyo Revengers]Where stories live. Discover now