Lo que tanto anhelo. (Sword Art Online: Alicization)

capitulo 1 : mal presentimiento

No dormí en toda la noche. esa sensación sobre las montañas del fin no dejó de perturbarme, talvez era paranoico pero simplemente decidí que no era importante.

Aun con mi pijama y sin despertar a nadie salí a de la casa, al salir y ver hacia arriba vi que aún no salía el solus así que lo más probable es que la hora estaría alrededor de las 5:00 am. Debido a que eramos pobres y no teníamos reloj aprendí a diferenciar la hora midiendo el solus y la luna.

Después de estar aproximadamente una hora viendo como amanecía sentí que se abría la puerta, era Ayumi.

-pequeño ¿que haces aquí afuera tan temprano?

-solo quería ver el amanecer ¿y a ti que te levanto hermana? -pregunte sabiendo la respuesta.

-ya lo sabes, a esta hora nos despertamos para llegar a la mansión de los nobles a tiempo, y como no te vi durmiendo creí que habías escapado.

-ya veo, tranquila no escaparía sin ninguna razón. -dije aún mirando como salia el solus.

-es muy bello ¿no crees? -mi hermana al decir esto se sentaba al lado mio.

-si que lo es. ¿hermana?

-¿que pasa Raijin?

-¿puedo abrazarte un momento? -dije en voz baja.

-claro que si, ¿pero hay alguna razón especial?. -dijo algo extrañada ya que yo no solía demostrar mucho afecto.

-no es así, solo tengo frío - se lo dije con una cara totalmente seria pero esa no era la razón por la que quería abrazarla.

La verdad es que quería abrazarla por todo el esfuerzo que hacía al igual que Rin y mamá. Pero Ayumi era la que siempre me animaba y pasaba más tiempo conmigo es por eso que se lo agradecía muchísimo.

-te quiero -lo dije tan bajo posible para que no pudiera escucharlo.

- yo igual hermanito -respondió Ayumi.

-ehh!? Yo no... - Ayumi me callo y me dio un beso en la mejilla.

-vamos a desayunar ¿si?, mamá y Rin ya están despiertas -decía Ayumi levantándose.

Yo solo la seguí en silencio avergonzado. Al llegar adentro ya estaba en la mesa el desayuno como de costumbre, pan de talvez hace dos días era tan duro como una roca y agua que sacábamos del río talvez nisiquiera estaba limpia pero era todo lo que teníamos.

-¿que hacían afuera chicos? -preguntó mi mamá.

-solo estábamos mirando el amanecer -respondí mientras mordía con fuerza el pan.

El desayuno fue bastante silencioso como de costumbre. Cuando llegaron lo que suponía las 6:30 am terminaron de comer y tanto como mis hermanas y mi madre se despidieron y fueron a la mansión de los nobles para iniciar su tarea sagrada una vez más.

Yo simplemente seguí comiendo unos cinco minutos más y luego recordé que me encontraría con Kirito y sus amigos a las 7:00 am así que salí de casa en camino a la puerta del norte.

Al parecer fui el primero en llegar así que me senté al lado del guardia de la puerta y espere lo que fueron 15 o 20 minutos talvez.

-hey!!! Raijin!! -me di la vuelta al escuchar una frágil voz venir desde atrás.

Allí fue donde vi a Alice quien corría saludando con su mano derecha y con la contaría sostenía su canasta. Espere a que llegara y la saludé.

-buenos días Alice. -le dije mientras le sonreía.

-que bien que llegue a tiempo pensé que seria tarde. -decía sin aliento.

-tranquila no me iría, además aun no llega Kirito ni tampoco Eugeo.