El Abanico Roto

No podía aceptar que simplemente llegara hoy aquí a decirle todo esto cuando en ese momento por más que le suplicó, tomó la vida de su única familia, la persona que tanto quería por cuidar de si y estar siempre ahí cuando más lo necesitaba.

No es tan simple... ¡No es tan simple!

_*Gritó pero al darse cuenta, tragó saliva y soltó un suspiro pesado tratando de aclarar su mente e ideas.*_

Sé que en ese entonces... mi hermano no actuó de manera correcta pero... era mi familia... lo único que tenia y tú...

_*Sentía el agua salada deslizarse silenciosa sobre sus mejillas, se mordio los labios para contener cualquier sollozo que pudiera salir. Se reincorpore, limpió mi rostro y lo miró fijamente.*_

Eras mi amigo. Aún así, me dejaste con vida y hasta ahora estoy escuchando todo esto...

_*Respiró profundo para calmar sus nervios y emociones. Sabía que después de todo, no era su culpa. Él también había sido una víctima que perdió a sus padres, novia y hermana además de su divinidad. se mantuvo en silencio por largo tiempo pensando, analizando la situación.*_

Necesito tiempo.

_*Miró hacia otro lado sin saber que sentir y se abrazo a si mismo. Las lágrimas finalmente se habían detenido.*_

Todo esto... no lo esperaba... nada de esto. Incluso imaginé que jamás volvería a verte y ahora... con todo lo que dices... estoy confundido. Necesito pensar un poco antes de nada...

No te volveré a molestarte Qing Xuan. No ..no vine antes a .. no... Yo.. yo te cuide cada día desde que te deje acá, por que crees que siempre tenías comida? Te trataron de matar muchas veces y no hicieron nada porque .. yo lo evite.

*Mordió su labio inferior y no podía evitar llorar. Siempre fui muy emocional y lo evitaba*

.

Hoy.. no pude aguantar más, no pude seguir en silencio. Se que tu hermano era tu familia, yo lo iba a torturar y vengar a mi familia, pero... Pero al ver que prefirió ahorcarte y matarte con sus manos en vez de vivir como mendigo... No pude no... Podía dejarlo impune. Había .. tocado con sus sucias manos a quien en esta vida había valorado como a nadie.

*Suspiró, habia dicho todo por fin*

Yo... no sé qué decir...

_*Bajó la mirada escuchando sus palabras. Estaba tan sorprendido de lo que me decía que no supo decir más nada. Se sentía confundido, abrumado por todo que no sabía que decir.*_

Agradezco... que hayas cuidado de mi... realmente note lo que dijiste pero... nunca imagine que era debido a ti.

_*A pesar de todo, en lo profundo de su corazón aún existia una parte de si que le quería y por los buenos momentos a su lado, estaba dispuesto a dar las gracias por sus buenas acciones hacia el.*_

Sin embargo... sólo eso... estoy confundido y... no me siento capaz de corresponder tu sentimiento justo ahora... porque nisiquiera yo mismo sé lo que siento...

_*Lo miró de nuevo, su expresión era algo difícil de describir.*_

Dame tiempo para pensarlo... todo ha sido tan repentino y... necesito pensar muchas cosas...

No te preocupes Shi Qing Xuan, no te volveré a molestar.

*Se acerco a él, lo miró a los ojos*

Desde hace unos... 500 años todo fue real. Cuida con tu vida el abanico...

*Trago saliva, miró hacia abajo, le tomó la mano y dejó un segundo abanico mucho más detallado, con joyas verdes y adornos de coral y perlas rojas. El papel del abanico era hecho por él, todo todo fue en detalle pintado , tallado y tejido*

Adiós

*Terminó el portal y empezó a atravesarlo*

Cuidate QingXuan