"CAPÍTULO 12"

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"Saber Lo Que Sientes" pt.II

☆ ☆ ☆





Mila se encontraba el lo que parecía ser una clase de taller, quería añadir unas mejoras a viernes por lo que la desactivo quedándose por el momento sin una asistente. Un mensaje llegó a su teléfono era de Izuku que decía "estoy afuera" con esas palabras Mila verifico con la cámara de seguridad y vio a su amigo con un semblante decaído y sin más salió a recibirlo.

—sinto llegar sin avisar— dijo el peliverde ya dentro en la sala de estar con una sonrisa, nada que ver con él chico que estava en la imagen que ella había visto

—no te preocupes— le tendió una taza con té

—¿Qué pasó con Viernes? no la escuche— trato de iniciar una conversación

—por el momento esta desconectada— ella le respondió

—entiendo, am oye Mila-chan ¿puedo quedarme aquí esta noche?— pregunto mientras veía el té en sus manos —por...  favor. . .— pidió

—no hay problema, ya sabes cual habitación— dijo la chica. No era la primera vez que el peliverde se quedaba a dormir en la casa de Mila, así que tenía una habitación donde había cosas de él.

—gracias— dijo con una sonrisa que se veía forzada —le dije a mi mamá que vendría a pasarte los apuntes y tareas y que me quedaría aquí—

—Son las 8:23 p.m. ¿donde estuviste desde que saliste de la escuela?— pregunto ella

—en la playa donde entrenamos— respondió él

—¿Qué es lo que sucedió?— lo cuestiono

—nada Mila-chan, simplemente quería relajarme— trato de sonar normal y sonrió

—las personas tienen un lenguaje corporal con ello puedes leerlas, y mi sentido del olfato esta muy desarrollado puedo oler tu nerviosismo entre otras cosas. Además. . .  eres muy malo mintiendo— le dijo Mila viéndolo fijamente

—Yo... yo no quiero hablar de eso— dijo, la sonrisa en su rostro desapareció —No quería llegar a casa y que mi madre me viera así, ella a tenido un gran cambio y es feliz no quiero arruinarlo y hacer que se sienta culpable otra vez— dijo  viendo al suelo —Por favor Mila-chan, olvidalo— pidio

—estaba por pedir algo de cenar, puedes ir a dejar tus cosas y tomar un baño para relajarte— dijo Mila cambiando de tema e Izuku asintió y se fue —tendré que irme más tarde de lo previsto— dijo en un susurro para sí misma


[. . .]



La cena había llegado era ramen de un restaurante de comida tradicional ambos amigos comieron en total silencio, al terminar Izuku ayudo con los platos y vasos mientras Mila le daba unos premios a sus gatitos.

—Yo... iré a acostarme Mila-chan, hasta mañana— sin más se fue a toda prisa a su cuarto

Mila no podía con la curiosidad de saber que es lo que le pasaba a su amigo, fue a la habitación que podría decirse que le pertenecía a Izuku y tocó la puerta.

—Izuku, ¿puedo pasar?— dijo, no recibió respuesta —se que estas despierto, tu respiración es entrecortada y puedo oler el agua salada, tus lágrimas. Por favor, me dejarías entrar— escucho como unos pasos se encaminaban a la puerta para después oír como se abría

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