capítulo IV

8.9K 783 710
                                    

TW: ⁱⁿˢⁱⁿᵘᵃᶜⁱᵒ́ⁿ ᵈᵉ ᵃᶜᵗⁱᵛⁱᵈᵃᵈ ˢᵉˣᵘᵃˡ ᵉⁿᵗʳᵉ ᵐᵉⁿᵒʳᵉˢ.

» Craig Tucker

Podía ver de reojo como se movía de un lado a otro, el tic de su pierna estaba siendo persistente y sus dedos tamborileaban sobre si mismo. Estaba pensando en algo, algo que lo angustiaba, no era en vano todo el tiempo que llevábamos juntos. Cuatro años, Cuatro años y cincuenta y seis días, doce horas y treinta y dos segundos para ser exactos. Lo recordaba bien, tantos meses dentro de la caja no harían que pudiera olvidar algo tan importante; todavía estaba consiente, todavía razonaba y eso me hacía darme de algo, me daba cuenta de lo que pasaba con Tweek y conmigo.

Él iba a dejarme, posiblemente dejó de quererme hace mucho tiempo. No podía culparlo y tampoco podía culparme, a pesar de que todo fue mi culpa. Por más que tratará de no culparme porque nuestra relación se había ido a la mierda sabía la verdad de nuestra situación, yo era el villano que le había robado toda su paciencia, todo su avance, todas sus esperanzas de ser alguien normal.

Mientras seguíamos en este incómodo silencio y yo veía ese tic en su pierna recordé como fue que llegamos aquí; desde que éramos niños que fingían un noviazgo para mantener al pueblo feliz, hasta unos adolescentes enamorados que se tardaron en querer aceptarlo. Al principio todo marchó bien, a él le parecía tierno que me gustará el espacio y las cobayas, yo amé que sin importar su apariencia nerviosa y sumisa fuera un chico dispuesto a sacarle la mierda a cualquiera que lo retará.

Incluso recuerdo una vez que él, en una de nuestras primeras citas, dijo algo como "Nunca nadie se había interesado por mí o por las cosas que hago, ni por cuántas veces toco mi cabello cuando estoy nervioso. Y yo jamás había sentido la necesidad de tener a alguien así, hasta que te conocí." Y entonces él sonrió y me plantó un beso en los labios, puro e inexperto, un beso tierno que sería el primero de ambos... o al menos eso hubiera sido lo ideal.

Definitivamente él me dió una de sus bellas sonrisas, pero no hubo ningún beso o algo que me demostrará que lo que estaba diciendo era verdad. Y ese era el problema. No había algo que me asegurará que siguiéramos fingiendo o que en verdad estuviéramos en una relación real. Al menos no de su parte.

Yo era el de los apodos, y yo era el que tenía claros sus sentimientos. Yo admiraba la sonrisa que me ofrecía cada mañana cuando caminábamos juntos hasta el colegio, el tic nervioso en su ojo -cada vez más difícil de ver- pero que aparecía cuando se molestaba, su forma de pasar su lengua por sus labios antes de beber su café. Era ridículo la cantidad de horas que podía pasar embobado solo viendo el brillo de sus ojos azules, hermosos zafiros que irradiaban cariño, pero que ahora por mí culpa lucían apagados y melancólicos, con unas grandes ojeras que hace mucho no aparecían.

Lo entendía, él poco a poco se fue cansando. Mi actitud lo desgastó y yo ya no podía hacer nada. Mi inmadurez arruinó mi relación y él encontró a alguien mejor. De eso último aún no estaba seguro, pero incluso si no fuera cierto, pronto lo haría. Tan solo con haberlo encontrado mirando porno en la escuela me podía dar cuenta que ya no estaba interesado en mí. Estaba bien, yo trataría de sobrellevar que su mirada tendría brillo por alguien más, los besos que no me dió le pertenecerían a alguien más, y sus sonrisas estarán reservadas para alguien más.

- ¿C-Craig..?

Su voz rompió el silencio incómodo entre nosotros y me sacó de mis pensamientos, aún así lo ignoré, justo como lo había estado haciendo durante todo este tiempo. No le iba a demostrar que todo esto dolía más de lo esperado.

Yo seguí recostado sobre mis almohadas, con el celular entre mis dedos fingiendo estar distraído. Tan solo intentaba pensar en como tendría que actuar cuando ya no fuéramos pareja, ¿Habría sentido alguno en continuar utilizando la caja? seguro que no, pero no sabía de una manera en la cuál podría volver a mirarlo a la cara después de todo lo que pasó. ¿Él se seguiría juntando con Clyde, Jimmy o Token? posiblemente se iría con los bastardos del team Stan.

kiss me more ▸ creekKde žijí příběhy. Začni objevovat