V

183 31 0
                                    

----Liberio es un lugar bonito y acogedor, sin embargo desearía poder irme de aquí un día. Explorar el mundo es mi más grande sueño.

Ambos rubios se detuvieron en un pequeño puesto ambulante de dulces que siempre deambulaba por la zona central de la ciudad. Con las monedas que Armin se ganaba por sí mismo ayudando a su madre a cuidar a algunos ancianos, el chico compró dos piruletas y una dona de fresa.

Mientras Annie se mantenía en silencio pensativa bajo el sol que brillaba con más intensidad a esa hora del día.

Armin le tendió una piruleta y la dona dulce con una servilleta.

----Se que son tus favoritas.

Pero la rubia aceptó aún pensativa.

----¿Qué sucede? ¿Te sientes bien, Annie?

----Estoy bien. Solo pensaba... Tienes un bonito sueño. Yo no tengo uno, creo que jamás lo he tenido. Desde que recuerdo todo en mi vida se ha limitado a entrenar y enorgullecer a mi padre

Armin miró al cielo, pensando. Cuando tuvo una idea regresó la vista hacia la chica.

----No creo que no tener un sueño ahora sea algo malo. Puedes tomarte tu tiempo hasta que encuentres algo que de verdad quieras...

La chica sonrió de forma apenas perceptible y de forma inconsciente mordió la dona en su mano.

----Pero si de verdad quieres un sueño, estoy dispuesto a compartir el mío contigo. ¡Los dos podemos explorar el mundo si así lo deseas!

Annie, conmovida por la emoción y las palabras de Armin, se derritió de placer ante el sabor de la fresa en su boca con una mueca demasiado evidente.

El niño se rió, de forma escandalosa pero aún así tan brillante como el mismo sol que cada mañana pintaba las mejillas de Annie.

----Te dije que sé que tienes una debilidad por las cosas dulces.

----¡No te atrevas a contárselo a nadie!

----No te preocupes, ----rió un poco más----; sin embargo, creo que ya tengo el apodo perfecto para tí.

----¿Apodo?

----Así es. Ahora eres dulce.

Te Quiero, Por Favor Regresa [Aruannie] ||SNK||Where stories live. Discover now