Sometimes (JimSu)

671 101 11
                                    

Los viejos recuerdos podían llegar a inundar los pensamientos de ambos, y es que el simple hecho de pensar que el destino había sido tan cruel para ambos ha sido de lo más despiadado que les ha ocurrido.

Desde pequeños, al instante en que se encontraron, se habían percatado de que estarían juntos para el resto de sus vidas, pero...

—¿Cómo has estado? —pregunto Jimin, el alfa había citado a Yoongi a una cafetería cercana al edificio de departamentos en dónde se encontraba viviendo, el omega bajo un poco la mirada, sus manos se encontraban en su regazo, formando puños, apretándolos débilmente, sin causarse algún tipo de daño con sus uñas cortas enterradas en sus palmas.

Jimin siempre le ha preguntado aquello, cada día, desde que se conocen, en lugar de un saludo, era siempre aquella pregunta, le encantaba que hiciera esa clase de preguntas, era simplemente perfecto pensar que aquel alfa se preocupaba por su estado, y en realidad ahora no se encontraba para nada bien.

—Jimin... tenemos que hablar de algo importante —menciono Yoongi.

—¿Qué pasa, omega? —Yoongi aparto la mirada al escuchar aquello, casi no era habitual en Jimin nombrar a Yoongi por su nombre, se la pasaba diciéndole omega, como si una marca dijera que ambos se pertenecían, pero era todo lo contrario.

Nunca ha habido alguna marca de por medio.

La invasión de nuevos recuerdos azoto a Yoongi en un momento, y sabía que no era el momento indicado para perderse de nuevo en aquellas viejas memorias.

El encuentro de ambos, apenas eran unos cachorros, y el día de la presentación de ambos, había sido el más feliz de todos, pero, ¿por qué no habían sentido aquella conexión tan especial que sienten omega y alfa al saber que están justo con su pareja destinada? ¿Por qué no habían sentido aquella indescriptible sensación que tanto presumían sus padres haber sentido? ¿Qué estaba mal?

—Encontré a mi destinado —esas palabras habían caído como plomo hacia Jimin, una punzada se centró en su pecho al escuchar eso, no esperaba que tal noticia saliera de los labios de Yoongi, apretó sus puños y la mandíbula, impotente, era así como se sentía.

—¿Sentiste esa conexión? —a Jimin le había costado quitar el nudo que se formaba en su garganta, pero logro que las palabras salieran como agua al instante que hizo aquella pregunta, y el dolor era evidente en cada palabra, Yoongi lo había presentido.

—Él dice que la ha sentido —decía mientras negaba lentamente—, pero en cambio, no sentí lo mismo, tengo miedo de no sentir nada, se supone que es mi destinado, no entiendo por qué no sentí nada, Jimin.

—Tal vez solo lo dijo para hacerte sentir especial —menciono Jimin, solo esperaba que la realidad no fuera que aquel que haya sido quien le haya dicho eso a Yoongi, fuera en realidad su destinado.

—No, Jiminie, es él, mi lobo me lo dice, tal vez soy yo quien no quiere admitirlo.

Y tal vez eso es una realidad.

Jimin cerró los ojos momentáneamente, todavía recuerda cuando él encontró a su destinada, todavía recuerda cuando se lo dijo a Yoongi, todavía el dolor tan grande en su pecho se podía palpar con solo recordar aquella noche.

El omega no había parado de llorar todo el tiempo, se había quedado con él para hacerlo sentir que estaba para él en ese momento, y que podía dejar de sollozar, pero simplemente Yoongi no había podido dejar de llorar aquel día, y Jimin se sentía tan culpable por haber mencionado tal cosa frente a él, era verdad que solo había sentido en parte algo de alegría al poder encontrar a su pareja destinada, pues se sentía devastado, su lobo se sentía feliz, pero era muy distinto para él, pues Jimin se sentía a gusto al lado de Yoongi, no quería otro omega, él quería estar con Yoongi, nada más con él.

One - Shot'sDonde viven las historias. Descúbrelo ahora