El "yo" de tus pensamientos

Despertar contigo

Después de una intensa noche, Wei Ying durmió más de la cuenta, pero al despertarse y ver que Lan Zhan estaba a su lado lo llenaba de felicidad.

- Buenos días. — Dijo Wei Ying con tono cariñoso.

- ¿Dormiste bien? — Preguntó Lan Zhan mientras acariciaba delicadamente su rostro.
(Es tan lindo recién levantado.)

- ¡Si! Aunque casi no dormí. — Respondió provocándolo.

(Aún es de mañana y ya...)

- ...Vamos a desayunar. — Dijo Lan Zhan mientras sus orejas se tornaban ligeramente rojas.

- Jajaja, está bien. — Dijo Wei Ying mientras reía.

Cuando bajaron vieron que Xichen ya tenía todo preparado.

- Oh, ya están levantados, por favor sírvanse. — Dijo Xichen mientras sonreía.

- ¡Gracias! — Respondió Wei Ying alegre mientras se sentaba a comer.

Mientras desayunaban un pensamiento alertó a Wei Ying.

(Dios mío, se que están en una relación pero no puedo creer que Wangji sea tan posesivo.)

Wei Ying no entendía muy bien a que se refería Xichen, pero cuando vio su reflejo en uno de los espejos no pudo evitar morirse de la vergüenza.

Su cuello estaba lleno de chupetones y mordidas, casi como si estuviera gritando al mundo que tuvo sexo.

(Ah... espero que hayan usado protección.)

(¡Ya basta! ¡Deja de decir eso en tu cabeza mientras en el exterior solo muestras una sonrisa! ¡Me voy a morir de vergüenza!) — Pensó Wei Ying mientras evitaba la mirada de Xichen.

- ¿Está todo bien? Tu cara está un poco roja. — Preguntó Lan Zhan mientras tocaba su mejilla.

(No actúes inocente, esto es tu culpa.) — Pensó Wei Ying.

- Sí... — Respondió.

- Oh, es un poco tarde, discúlpenme por retirarme primero. — Dijo Xichen mientras se levantaba de la mesa. - Espero que hayan disfrutado el desayuno. — Agregó mientras se  iba.

- ¡Lan Zhan! ¿Por qué no me dijiste que lucía así? ¡Ahora tu hermano sabe lo que hicimos anoche! — Reclamó Wei Ying.

- No importa como luzcas, de seguro nos escuchó anoche, así que era inútil esconderlo. — Respondió Lan Zhan tranquilamente.

- ¡Eso es mucho peor! — Dijo Wei Ying avergonzado.

- Está bien, a Xichen no le importa. — Respondió Lan Zhan mientras lo sujetaba de la cintura atrayendolo hacia él.

Wei Ying no podía evitar ser seducido por su apuesto novio así que solo puso sus brazos alrededor de su cuello y procedió a besarlo.

- Lan Zhan...

- ¿Mn?

- ¿Quieres tener una cita conmigo? — Preguntó Wei Ying sonriendo dulcemente.

- Sí. — Respondió Lan Zhan.

Continuará.