10. Fiesta Benéfica

1.7K 160 8
                                    


T/N

Mi corazón se acelera al verla. Su gracia y actitud me atrae de sobremanera. Apenas entramos no tardaron los flashes y preguntas sobre nosotras, es increíble como la gente se emociona por cualquier cosa de una persona "pública", tengo muchos seguidores en mis redes sociales solo porque quieres chismosear la vida privada de un político. 

Es gracioso que las personas sean tan vacías para tener que llenar su vida de farándula. Pero bueno, la verdad me encanta tener a Jennie a mi lado, si todo sale bien la tendré a mi lado todas las veces posible. Me da gracia verme al espejo, desde que ingresamos, con Jennie agarrada de mi brazo, se me ha cansado la cara de tanto sonreír, es que ella siempre me trasmite cierta calma, pero no es algo aburrido o cansador. Es como si no me importara que hablara por horas sobre lo mismo, me alegraré de haberme escogido para escucharla. La alabaré y cuidaré cada pequeño detalle de sus relatos. 

Nunca me había interesado el tema amoroso como ahora, antes pensaba que estar con alguien era acostumbrarte a esa persona, sin sentir mucho. Solo saber que tienes la sensación de rutina, tal vez ahí está mi primer error. Pues con Jennie mi necesidad no es tener una compañía rutinaria, con ella siento que todo mi pecho se calienta el ver su sonrisa y no deseo nada más que generarla cada día. 

—Hola T/N. —Estoy en la mesa de bar charlando con compañeros políticos de mi padre, de repente siento su mano en mi hombro acompañado de su saludo. 

Desde corta edad siempre me ha interesado y he entendido la profesión de mi padre, o debería decir de mis familiares, me gusta discutir sobre las políticas fiscales, sobre el nivel de precios ajustado al salario mínimo o sobre la inflación dependiendo al producto interno bruto. Me fascina acompañar a mis padres a esta clase de eventos porque siempre hablo con personas importantes de la profesión social. 

—Disculpen señores. —Me despido de los hombres con lo que charlaba y volteo mi cuerpo quedando frente a frente a mis padres. —Hola, padre. —El abre sus brazos para mí y nos damos un breve abrazo como saludo. —Madre, te ves bellísima como siempre. —Ella se acerca y deja un beso en mi mejilla como solo ella sabe hacer.

—¿Qué tal ha estado la fiesta?

—Bien, padre. La música tan relajante como siempre, en algunos minutos empieza la primera subasta. 

—¿Piensas dar algún donativo? —Pregunta mi madre con su mirada esperanzadora, lo cierto es que por más que me gusten estos encuentros sociales, la mayoría de gente viene para hacer relaciones para sus trabajos, muy pocos en verdad donan porque les sale del corazón, eso solo alimenta la burocracia del país según mi madre. En fin, ella tiene el corazón más grande del mundo y piensa que aún hay gente que viene par ayudar un bien general y no por motivos egoístas. 

—Sí madre. Me interesa ayudar. 

—Eres una buena chica, mi vida. 

—Por cierto, ¿Dónde está tu acompañante, hija? —Interviene mi padre. —Quiero ver el vestido que tu madre le dio.

—¿Qué? Mamá... 

—No pude resistirme. —Le resta importancia mi madre encogiéndose de hombros con una sonrisa inocente en su rostro. 

—Pero mamá, no quería que Jennie-

—Deja de reclamarle a tu madre, T/N. —Me interrumpe Jennie llegando a mis espaldas. —Ella me lo ofreció de todo corazón y se lo agradezco. 

—Ash, de acuerdo. —Digo resignada y ubico mi madre derecha en la espalda baja de Jennie. —Padre, ella es mi cita Jennie Kim. 

—Escucha más a tu acompañante hija. —Dice mi madre con su sonrisa complaciente y Jennie ríe en respuesta. 

Bloody Naked (Jennie y tú) (G!P)Where stories live. Discover now